[12]
Paciencia.
" También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos."
1 Tesalonicenses 5:14
Hadasa.
—¡Camarera!
Me muevo rápido, recibo órdenes, entrego pedidos, voy de un lado a otro, particularmente hoy el día ha estado más acelerado que de costumbre.
Hace un mes que comencé aquí, el lugar me gusta bastante, es cómodo, acogedor, mi jefe es agrable y queda cerca de casa.
—Llagaron unos chicos a tu zona.
Eylin también está aquí, decidió trabajar conmigo, le ha ido bien, incluso mejor que a nosotros. En casa las cosas no han ido tan bien, la estabilidad económica ha bajado muchísimo, ni siquiera con tres trabajos podemos suplir, a papá le cobraron una multa por el inconveniente hace un tiempo y trata de no arrancarse los cabellos de la desesperación, ambos han estado orando, pero la angustia es notable en sus rostros, aunque traten de ocultarlo. Sé que mamá ha llorado, yo también lo he hecho, me duele que ellos estén, que estemos pasando por esto.
Sin embargo, como todo es parte de un propósito, confío en que Dios nos dará la victoria.
Bueno, ya la victoria la tenemos.
Me muevo a mi zona para encontrar a Jasper, Andrew, Liz y Ann en una mesa grupal. Saco la libreta del bolsillo de mi delantal junto con un bolígrafo. Eso otra cosa que me gusta de este trabajo, que el uniforme es cómodo, casi igual al del café de mis padres.
—¿Qué se les ofrece?—pregunto como a todos mis clientes.
Jasper levanta su mirada y se sorprende al verme, le sonrío.
—¿Hadasa?
Los demás levantan la cabeza al escucharlo y quedan igual de sorprendidos.
—¿Trabajas aquí?—pregunta Andrew.
Últimamente se ha vuelto muy comunicativo, yo creo que se sentía limitado, porque con nosotros habla, no mucho, pero lo hace.
—Sip—respondo dando una vuelta—¿Qué les traigo?
Cada uno ordena y me voy a la barra a preparar sus pedidos. De reojo veo que se acerca Eylin.
—¿Los conoces?—indaga mirándolos con curiosidad.
—Si,—hablo mientras preparo los cafés—son mis mejores amigas y unas ovejitas.
Ella asiente y se va a atender a unas personas en su zona.
Atiendo a los chicos y quedamos en vernos más seguido, últimamente no los veo casi, he estado ocupada trabajando, la universidad me tiene con el cerebro metido en un libro y en la congregación he estado atendiendo mis obligaciones como líder, lo que se resume a menos vida social. Tampoco me molesta.
Las dos horas restantes de mi turno pasan rápido, cambio mi uniforme y me despido de Eylin, hoy no me iré con ella porque haré algo primero.
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RADIANTES
SpiritualeS. Juan 1:9-12 RVR1960 [9] Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo. [10] En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció. [11] A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. [12] Mas a to...