Cárcel de animales

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" - El es de nuestra propiedad, nosotros somos sus reyes y ellos son los lacayos ¿como puedes tan siquiera considerar a la clase obrera como amigo? Ellos nos dan de comer y nosotros brindamos protección, nada más. Algo más allá de eso es simplemente rebeldía

- El me salvo

- Si dejaste que uno de la clase obrera te salvará, entonces tu eres el débil "

Algunos vagos recuerdos del pasado aparecieron en su memoria, con ello el sentimiento de incomodidad vino de la mano con ello. Lo cierto es que seguiría en su planeta de no ser por aquella vez, que aunque no se arrepiente para nada no deja de extrañar a sus iguales.

Aquel planeta aunque extraordinario, seguía siendo demasiado nuevo por las costumbres a pesar de ya llevar algo de tiempo ahí. La nave ya había podido ser reparada, pero ahora hacia falta combustible y al parecer es algo complicado conseguirlo en ese planeta, por lo que tendrían que esperar un poco más para ello.

Se dispuso a dar un paseo por la zona, Third estaba analizando algunos comportamientos nuevos en Alemania por lo cual tardaría un poco en ello. Esa no era su área, así que no tendría porque quedarse a ver algo que no entiende al 100%, el era más de rastreo y defensa, después de todo eso era en lo que se desempeñaba en su planeta antes de irse como explorador.

Era extraño simplemente pensarlo, estas peleando con un ser del tamaño de Mimas junto a tus iguales, y al otro día estás dentro de una nave con un clase obrera y una gelatina parlante. Su padre estaría... decepcionado, si es que no lo está ya, después de todo la manera que salio de su planeta no fue precisamente sabida por él.

Detuvo un momento su andar, habían bastantes partículas de algo que no reconocía pero no olía mal, de hecho olía bastante dulce. Sus ojos tornaron cierto brillo al ver lo que estaba frente; un campo hermoso de flores se extendía más allá de lo que podía ver, muchos bellos colores y lo mejor de todo es que no sentía amenaza alguna dentro de ellas.

Se transformó en su versión "can" lanzándose contra las flores y restregandose contra ellas, estar ahí le causaba una sensación de felicidad haciendo que empiece a saltar de un lado para otro, habían pequeñas criaturas voladoras así que las persiguió para morderlas y comerlas, aunque era más divertido verlas por la cantidad de colores y formas curiosas que tenían. Escucho un silbido no muy lejano a el lo cual lo hizo ponerse alerta, aumentando un poco su tamaño para intimidar.

- Tranquilo, tranquilo. Vengo en son de paz - habla aquel humano mayor levantando las manos con inocencia mientras se acerca tranquilamente - así que esa es tu forma. Definitivamente eres un perro alienigena, nisiquiera tienes pelo y tu cabeza es como rectangular

- ●○•○°°○●•●•○●○○•°○○•○••

- No te entiendo, háblame en un idioma que pueda entender

Second volvió a retomar su otra forma, poniéndose de pie pues estaba sentado después de transformarse.

- He dicho que me ofendes.

- ¿y en que sentido te ofendí?

- No soy un perro. Soy un Can

- Aquí es prácticamente lo mismo

- Pues entonces para mi un Neanderthal y tu son lo mismo también

El ruso sonrió con gracia, no tenia demasiado conocimiento en el área de la ciencia como su hermano pero sabía perfectamente que aquello era un cavernicola.

- esta bien, esta bien. Lo siento entonces, pero mírate, te has revolcado entre toda esa tierra - habla el humano sacudiendo la ropa del alienigena, sería prácticamente la primera vez que se deja tocar sin contar la vez borracho - Vi que creciste de tamaño ¿que tanto puedes crecer?

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