Recordé en la cocina, como si hubiera sido ayer... cuántas veces me habían echo bullying en el colegio... cuantas veces había llorado e incluso cuantas veces los maestros me habían ignorado mientras sangraba...
Recuerdo también como mis pies sangraban en el escenario del teatro tanto en las prácticas como en las obras y cómo pisaba esos cristales y todos se reían mientras me veían representar una obra de teatro...
Recuerdo que un día llegue llena de heridas porque mis compañeras se habían juntado para pegarme por haber conseguido el papel principal, ese día abandoné ese colegio, el club, y nadie volvió a saber nada más de mi por esa zona..., en mi nuevo colegio recuerdo que había un pequeño grupo que también me hacía bullying...pero no era mucho, era muy poco, ademas solo inventaban rumores más que pegarme, en k-12 era bastante diferente...
Nunca volví a uñirme a un club de teatro... solo me uní al club de las plantas y al de lectura...Después de la escuela, recordaba que lo único que me hacía feliz era ir a la casa de mi bisabuela, que fue la que me puso el nombre ( mi bisabuela adoptiva, eran mi vecina hasta que se mudó y le dijo a mi madre que me pusiera Elisabeth lunela, un rollo para explicar...), el caso es que cuando iba a du casa, me sentia genial, porque siempre comía galletas y me contaba historias de su vida cuando era mas joven... Hace pocos días se fue y no fue mucho agrado para mí... Ya que la amaba y la quería con toooooodo mi corazón... Y al llegar a su funeral y ver a todos mi familia adoptiva llorar y a mí se me salieron las lágrimas el doble...