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La noche de baile de máscaras en la refinada casa de los Kim estaba en pleno apogeo, la música fluía suavemente por el salón principal decorado con luces parpadeantes y telas lujosas

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La noche de baile de máscaras en la refinada casa de los Kim estaba en pleno apogeo, la música fluía suavemente por el salón principal decorado con luces parpadeantes y telas lujosas. Los invitados, elegantemente vestidos y ocultos tras magníficas máscaras, se deslizaban por el salón en un baile armonioso.

En el centro de la sala, el duque Kim Namjoon, un hombre imponente con una máscara de oro y negro, bailaba con gracia junto a su esposa, la hermosa y distinguida Lee Yura. Su presencia llenaba la habitación y su elegancia irradiaba poder y autoridad.

- ¿ No puedes sonreír un poquito? - insistió la omega, al ver la seriedad de su marido, incluso, con la máscara puesta. - Estamos en una fiesta, por dios.

El alfa, suspiró como respuesta, mientras, una sonrisa forzada se formaba en su rostro. - Nunca he sido un amante de las fiestas.

" Las fiestas de máscaras, siempre habían sido sus favoritas. "

Cerca de ellos, Kim Jennie, la hija menor del duque, reía y charlaba animadamente con los jóvenes de la alta sociedad. Su vestido relucía a la luz de las velas y su máscara floral le daba un aire de misteriosa belleza.

- Hoy está reluciente, señorita Kim.

Cuando la mujer se giró, un bonito joven fue lo que se encontró, con una altanera sonrisa en su rostro.

- Vuestro cabello brilla como el sol en la mañana. Vuestra belleza eclipsa a todas las demás damas en este salón.

Suficiente.

Con un intento de sonrisa en su rostro, Jennie contestó con dulzura y educación. - Os agradezco por vuestras palabras tan amables, joven caballero, pero debo aclararos que no busco compromisos matrimoniales en este momento.

- ¿Cómo es posible? - insistió el joven. - Sois la única omega de la familia Kim, seguro que debéis tener muchos pretendientes.

- Es verdad que mi linaje es noble. - contestó ella. - Pero mi independencia y mi libertad valen más que cualquier título o riqueza. Vivo feliz sin depender de un hombre para mi felicidad o bienestar. Así que, no os preocupéis por mí, caballero, mi corazón no está en busca de esposo, sino de aventuras y conocimiento.

Y dejando al joven con la palabra en la boca, la omega salió de allí, mientras se dirigía hacía la conversación donde su tío era participante.

- ¿ Otro pretendiente? - preguntó el mayor, mientras la mujer solo se dedicaba a asentir.

- Y todos igual de impertinentes.

Kim Seokjin, el hermano del duque, al igual que su sobrina, el siempre tenía miles de pretendientes, y por muy extraño que parezca, nunca se había llegado a casar, ni siquiera había llegado a cortejar a ningún omega.

- Seré igual de solitario que tú. - dramatizo ella, provocando una carcajada en el mayor.

- Mientras seas rica, el resto da completamente igual.

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⏰ Última actualización: Jun 25 ⏰

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