Te estabas quedando dormida en el regazo de Jungwoo durante la noche de cine en los dormitorios con los chicos. El sueño estaba empezando a calmarse, pero empezó a desaparecer una vez que sentiste que algo tocaba la parte interna del muslo . Moviste un poco el trasero para ver si era lo que estabas pensando.
"Detente." Jungwoo te susurró, sosteniendo tu cintura hacia él. Volviste la cabeza para mirarlo , él estaba mirando la película como si no hubiera dicho nada.
Enterraste la cara en el hueco de su cuello, presionando tus labios ligeramente contra su piel pero sin hacer nada más que eso. Clavó sus dedos en tu piel con un poco más de fuerza como advertencia.
"Woo, ámame por favor".
Jungwoo los acomodó a ambos cómodamente en el sofá y en la manta que los cubría, sin alertar al resto de los miembros que estaban sentados cerca.
Gracias a Dios y Taeyong por elegir una película de acción esta noche. Porque nadie estaba concentrado en nada más que en esa pantalla.
Tú llevabas unos shorts finos y él llevaba shorts de baloncesto, por lo que fue fácil apartarlos a ambos del camino.
"No hagas ningún sonido." Te advirtió, deslizándose dentro de ti. Mordiste la piel de su cuello para mantener los sonidos dentro cuando se desliza dentro de ti.
Jungwoo dejó escapar un silbido agudo ante tu repentina respuesta de imposición de dolor. Sus dedos alrededor de tu cintura se aprietan un poco para evitar empujarte. Una vez que pasó el impulso, relajó sus dedos y te dio un beso en la frente.
"Te amo." Susurraste contra su hombro.
"Yo también te amo."
El resto de la película se desarrolló con él enterrado profundamente dentro de ti, disfrutando de la intimidad que el momento les brindó a ambos.
Se sentía como si fueran solo ustedes dos y nadie más.
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