Cupcake 5

Ys emo

Young Soo veía su celular por milésima vez mientras se mordía las uñas, un viejo hábito que había jurado dejar hace varios años.

"Ugh... ¿Por qué no me contestas?"

Ya estaba ansioso y triste antes de tirar su celular a la cama con un suspiro de frustración. Eran sus primeras vacaciones en todo lo que llevaba de idol, pero no podía descansar. Rápidamente se estaba arrepintiendo de su decisión de comprar un departamento para él solo y ya no vivir en los dormitorios con las chicas, pero ya no había mucho que hacer. De igual manera, no habría nadie ahí, no a esta hora al menos. Mira su celular al borde de la cama y nuevamente lo toma para ver si tenía algún mensaje nuevo. Ninguno.

Los primeros días de sus vacaciones fueron bastante productivos. Todo el tiempo estuvo saliendo con sus mascotas, entrenando y componiendo, pero ahora simplemente no sentía nada más que aburrimiento. Amaba tener espacio personal, pero no por mucho tiempo. No quería molestar a las miembros de su grupo y sus amigos viven ocupados. Pregúntenle a Mark. Su única salvación era su lindo y tonto novio Lucas, quien para su mala suerte, estaba de gira y actualmente se encontraba en Indonesia. ¿Por qué su suerte era tan mala? Ya ni siquiera se podía quejar y llorarle por llamada, porque no le estaba contestando. Para este punto, Young Soo solo quería llorar como un niño chiquito y después acostarse para recibir mimos, pero ya era un adulto de 24 años, no podía estar haciendo eso.

Toma una calada de su vape mirando a la ventana de su apartamento con un largo suspiro.

Decide levantarse de la cama y caminar un poco por el apartamento. El silencio lo envolvía, solo roto por el zumbido ocasional del refrigerador. Se dirigió a la cocina y abrió la nevera, buscando algo que pudiera aliviar su ansiedad. No había mucho, solo algunas sobras y bebidas energéticas.

Con un suspiro, cerró la puerta y se sirvió un vaso de agua. Se apoyó en el mostrador, mirando el líquido transparente que giraba en el vaso. "Tal vez debería llamar a Mark de nuevo", pensó. Pero rápidamente descartó la idea, sabiendo que su amigo probablemente estaba tan ocupado como siempre.

Regresó al salón y se dejó caer en el sofá. Miró a su alrededor, notando lo vacía que se sentía su vida sin la presencia constante de su grupo y, sobre todo, de Lucas. Encendió la televisión, buscando algo que lo distrajera, pero nada parecía captar su atención.

Finalmente, decidió ponerse a componer. La música siempre había sido su refugio, su manera de expresar lo que no podía decir con palabras. Tomó su guitarra y comenzó a tocar algunas notas. Poco a poco, se dejó llevar por la melodía, perdiéndose en el proceso creativo.

Horas más tarde, se dio cuenta de que había perdido la noción del tiempo. Miró el reloj y se sorprendió al ver que ya era de madrugada. Su estómago gruñó, recordándole que no había cenado. Dejó la guitarra a un lado y fue a la cocina, preparándose un sándwich rápido.

Mientras comía, su celular vibró en la mesa. Lo tomó con rapidez, su corazón latiendo con esperanza. Era un mensaje de Lucas: "Perdón por no contestar antes, he estado muy ocupado. Te extraño mucho. ¿Cómo estás?", estaba seguido de emojis tontos y un sticker de un perrito llorando.

Young Soo sonrió, sintiendo que una parte de su ansiedad se desvanecía. Respondió rápidamente: "Te extraño también. Solo quería escucharte. ¿Puedes llamar ahora?"

Unos minutos después, el teléfono sonó y la voz familiar de Lucas llenó la habitación. "Hey, cariño. ¿Cómo van tus vacaciones?"

Young Soo se relajó, sintiéndose reconfortado solo con escuchar su voz. "Han sido solitarias sin ti. Pero he estado componiendo un poco. ¿Y tú, cómo estás?"

La conversación fluyó de manera natural, cada uno poniéndose al día con sus vidas. Por un momento, la distancia entre ellos se desvaneció y Young Soo se sintió más cerca de Lucas, como si estuviera ahí mismo, a su lado.