Capitulo 1

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Jim se despertó con el sonido del despertador a las cinco de la mañana.

La tenue luz del amanecer apenas se filtraba por las cortinas de su habitación.

Con un suspiro, se sienta en la cama, desperezándose mientras estira los brazos por encima de la cabeza.

Miro a su alrededor antes soltar un bostezo mientras se levantaba de la cama sintiendo el frío del piso

Y sin perder más tiempo comenzó a realizar un poco de ejercicio para calentar sus músculos.

Después de sentirse satisfecho, se dirigió al baño, se desnudo rápidamente, coloco su toalla y tomo el bote shampoo casi vacío de la alacena haciendo que soltara un suspiro

Tendré que comprar más- Murmuró antes de meterse a la regadera

Sin pensarlo dos veces dejó que el agua fría cayera sobre el, despejado por completo el sueño restante

Mientras se duchaba, pensaba en la larga jornada que le esperaba en el restaurante y del como podría atraer mas clientes.

Después de un haber estado un buen rato bajo el agua, salió de la ducha antes de envolverse con su toalla.

Se vio en el espejo notando el leve crecimiento de su barba antes de tomar su rasuradora

Comenzó a afeitarse cuidadosamente, eliminando la sombra de la barba que le había crecido que lo hacía lucir más viejo. 

Después de rasurarse y de cepillarse los dientes meticulosamente, asegurándose de que estuvieran perfectamente limpios.

Se peino el cabello con rapidez y aplica un poco de loción para después del afeitado, disfrutando del aroma fresco que emana.

Se miro de nuevo en el espejo, y sonrió levemente al ver que apesar de tener más de treinta se seguia viendo como un joven de 25 años.

De vuelta en su habitación, abrió el armario  sacando su uniforme del restaurante que era una camisa blanca, pantalones negros y un delantal negro.

Mientras se viste, su mente repasa la lista de tareas que le espera: preparar los ingredientes, revisar los pedidos, asegurarse de que todo esté listo antes de que lleguen los clientes.

Salió de su habitación para dirigirse al de sus cachorros, Abrió la puerta con cuidado notando a Phuwin acurrucado en la cama junto a Boston, notando lo cálido que estába el cuarto a comparación del suyo.

Con una sonrisa tierna, se acerco lentamente procurando no hacer ruido.

Cuando está lo suficientemente cerca, se inclina y les da un beso en las frentes.

Los amo, mis pequeños- susurra mientras los observa removerse- eres mi orgullo Boston- dijo antes de arroparlo mientras escuchaba un leve suspiro.

Les dió un último beso en sus mejillas antes salir de la habitación.

Mientras caminaba hacia la cocina, no pudo evitar pensar en sus cachorros y del como a pesar de las condiciones en la que vivían, lo amaban con locura.

Ya en la cocina, se preparo un café fuerte y, sin pensarlo dos veces, añade un piquete de tequila. Aunque le había prometido a su mejor amigo que dejaría de beber.

Para despertar y durar la jornada- piensa mientras revuelve la mezcla.

Con la taza humeante en la mano, se sienta por un momento en la mesa de la cocina, disfrutando del breve instante de calma antes de enfrentarse al bullicio del restaurante.

Finalmente, se pone los zapatos, toma sus llaves y su teléfono, y sale por la puerta.

El aire fresco de la mañana lo recibe mientras camina hacia las escaleras, listo para comenzar un día más en el restaurante.

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