Hace poco volví a escribir y no sé ni qué decir; tengo tantas cosas por describir que no sé por dónde empezar, pero trataré de comenzar.
Hace unos meses empecé a salir con un grupo de personas por insistencia de una amiga, y para mi sorpresa allí estabas tú. Realmente, en un principio no me pensaba ni acercar, pero por azares del destino empezamos a frecuentar. Por cosas de la vida el grupo se empezó a fracturar y yo no supe cómo reaccionar. De un momento a otro pasamos de ser casi 20 personas a solo ser 4 o 5 máximo. Y la amiga por la cual los conocí ahora ni siquiera me quiere hablar. No sé realmente qué pensar, ya que yo no elegí que esto empezara a pasar solo de un día para otro; ya no nos podíamos evitar; empezamos solo como algo temporal mientras tú aprendías algo de mí y a ella la lograbas recuperar, pero como dicen por ahí, las cosas nunca son como tú lo planeas.
Tú y yo empezamos a salir por fuera del grupo y un poco a escondidas, ya que realmente nadie se debía enterar, pero fue complicado, ya que empezamos a conectar y algunos empezaron a opinar que estaba mal y otros simplemente dijeron que si eso nos hacía felices, las opiniones de los demás no debían importar, ya que, si ellos no estaban dispuestos a apoyarnos, no era una amistad real. Poco a poco tú y yo nos empezamos a gustar sin siquiera imaginar lo que iba a pasar; ninguno supo qué acciones tomar y un día sin más un beso surgió por casualidad. Ninguno de los 2 supo cómo reaccionar y 2 de nuestros amigos estaban a casi estallar de la felicidad, por esa pequeña casualidad todo se empezó a desencadenar y poco a poco las cosas se empezaron a intensificar. Aun no sé qué sucederá, pero estoy ansiosa por ver en lo que esto se convertirá.