Don't wanna break up again

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El israelí hiba corriendo detrás de Egipto, quien andaba algo enojado, pues el Israel se había equivocado en un par de palabras durante la entrega de papeleo semanal que la organización de la paz siempre les dejaba a hacer a ellos, pero Israel mientras corría detrás de su pareja, sabía que se estaba lastimando, se estaban lastimando los dos mutuamente.

- ¡Egipto!, ¡espera! - grito Israel para tomar el brazo de su pareja (bueno en ese momento)

- Ugh, ¿qué quieres?, volver a avergonzarme quitándole ese parche, acaso quieres que se den cuenta que te pegue, que me vean como un maltratador ¿Eh?.- refutó el egipcio.

- Quería hablar contigo, no quiero arruinar tu corazón y tampoco quiero dañar el mío, pero me di cuenta que lo nuestro no funciona... Es que es una relación muy... - dijo el hebreo diciendo lo último en una voz más baja.

- Que, acaso quieres decir que es ¿toxica?, hay no me hagas reír, deberías ir a terapia - comento Egipto ya enojado.

- Pero ya fui a terapia, he gastado un montón de dinero, tambien pensé que era mi estabilidad emocional hacia ti pero me di cuenta que nada funciona, no quiero romper más tu corazón, no quiero jugar con tus sentimientos, haci que creo que deberíamos terminar... - comento el israelí.

- Pero... Yo lo lamento, se que debo ser un mejor novio pero no me dejes. - dijo el egipcio con un nudo en su corazón.

- ¡No!, ya lo intentamos varias veces, rompimos y volvimos pero no es lo mismo, recuerdas la vez que no querías escuchar mis disculpas y en vez de oírme decidiste subir el volumen del televisor, esto ya es demasiado complicado y me rompe el corazón, no quiero dejarte... Pero creo que es lo mejor para los dos, así podremos sanar. - hablo el israelí tomando las manos de su pareja.

- Está bien... Pero por lo menos abrazame una vez más, besame... - dijo Egipto.

La pareja se dio un beso, pero para el israelí ese beso era áspero asi que se separo rápido, le dio un abrazo al egipcio, las lágrimas empezaron a brotar en los ojos de ambos pues era la primera vez que terminarían en serio, puesto que el egipcio muchas veces había jugado con el corazón del contrario y nunca aporto a la relación en nada solo causaba más daño.

- Entonces esto es un adiós, ¿verdad? - dijo Egipto, comentando lo último como una pregunta.

- No Egipto, es un hasta nunca... - aclaro Israel para irse.

- ¡Israel espera! - grito el egipcio.

El israelí hiba a voltear a mirar cuando despertó del sueño, había vuelto a soñar con el egipcio después de que hablaron solo hace dos días, ese sueño siempre se repetía cuando cerrará los ojos, siempre estaba ahí, recordándole que realmente no voltio a mirar a atrás pues le dolió que el egipcio lo maltrato. Las lagrimas comenzaron a brotar, pero lloraba en silencio porque no quería despertar a su actual pareja, Estados Unidos se despertó adormilado, hasta que notó que el hebreo estaba hecho bolita en su pecho.

- Darling, ¿estás bien?. - preguntó el estadounidense.

- No... Estoy triste. - lloró el judío.

Automáticamente, el americano se levantó, y se sentó al lado de la cama donde estaba acurrucada su pareja.

- ¿Quieres mimos, Honey? - preguntó USA.

- shi... - contesto Israel para hacer un puchero.

- Bueno, entonces siéntate en mis piernas y te haré tus mimos.

Así pasaron como una hora, hasta que el más bajo pudo consiliar el sueño, el estadounidense solo pudo ver a su pareja tan cómoda que decidió mirar una película pues se le había quitado totalmente el sueño, así que puso intensamente 2, el estadounidense ya le hiba a cerrar sus ojos para dormir cuando sintió nuevamente el lloriqueo de alguien, bajo la mirada y era su novio, que estaba llorando pero estaba dormido. El americano lo levantó con cuidado y lo puso en su canto, el contrario aún dormido se calmó al sentir el tacto del abrazo del más alto.

Estados Unidos estaba preocupado, haci que decidió hablar con OMS para mirar si se podía arreglar una cita con el psicólogo, no es que creyera que su pareja estaba loca o algo por el estilo, era que le preocupaba la salud mental de Israel, pues aún por las noches soñaba con el egipcio, o lo maltrataba o recordaba la vez en que terminaron y no pudo despedirse de la manera adecuada. El judío se durmió abrazado junto con el americano quien después pudo consiliar el sueño y poder descansar.

Esa noche fue larga para ambos, pero lo que le daba fuerzas al estadounidense para seguir con el israelí, era que le había prometido que jamás lo dejaría, además de que el fue espectador del dolor que sufrió Israel durante su proceso de separación y no quería que volviera a la depresión, fue difícil para Israel salir de esa situación y más que nadie USA lo sabía, el estadounidense solo abrazo a el hebreo, durmieron abrazados toda la noche hasta que los rayos del sol golpearon los ojos de USA y se dio cuenta que Israel también estaba despierto.

- mmm, Hi honey... - pronunció el americano aún adormilado.

- Hi..., gracias por lo de anoche. - comentó Israel también con algo de sueño.

- No hay por qué agradecerme a mi, Darling, para eso son las parejas. - respondió USA mientras abrazaba a su pareja.

- Nos podemos quedar así más tiempo, no quiero levantarme - sugirió el israelí.

- Claro Honey - comento el americano para abrazar a su pareja.

Así se quedaron unos cuantos minutos, la verdad era que ellos dos se necesitaban mutuamente y cuando esos momentos de pesadillas le pasaban a Israel, USA siempre aprovechaba para abrazar al judio para alegrarle el día. Puesto desde que volvió a cruzar palabras con el egipcio su mente comenzó a tener estos sueños, como si su propia cabeza lo estuviera culpando de haber roto con el

Everything will be fine (USA x Israel )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora