Capítulo 1: Conociendo A La Novata
'Todo lo que tú quieres yo lo conseguiré y si no puedo, yo lo crearé'
|| De Vere Gardens, Londres ||
Lunes 12 de Marzo, 2023
Wilson
Me desperté esa mañana del lunes pensando en la fiesta de la noche anterior. Había asistido con entusiasmo al bar 'The Connaught' porque era el que ofrecía la mejor probabilidad de juerga para ser domingo.
La cabeza me retumbaba un poco a causa de la resaca a pesar de que mi habitación estaba en silencio.
Recordaba vagamente los sucesos nocturnos, había tomado más de la cuenta mientras observaba bailarinas expertas con poca ropa pululando en torno a los hombres más ricos que se podían avistar en ese sucucho de Londres.
Tengo que admitir que no me quedé atrás de la diversión; cuando asistía a ese tipo de eventos no era precisamente para privarme así que no hicieron falta más que un par de tragos para centrar mi atención en la que sería, con suerte, mi compañera de aventuras.
La afortunada era una mujer de cabello castaño claro hasta los hombros, de ojos marrones con un vestido de tirantes color azul que me resultó de lo más atractivo.
Me acerqué a ella con toda la galantería de la que era capaz con la idea fija de conquistarla. Resultó que Mary o Naty, no recuerdo bien su nombre, era simpática además de candente y no demoró demasiado en sucumbir a mis encantos ingleses.
Así que ahí estaba amaneciendo en mi casa con una hermosa joven reposando a mi lado con el torso desnudo que parecía no tener intención de despertarse.
—Oye muñeca —murmuré en el oído de la chica con suavidad mientras posaba mi mano en su espalda— no quiero ser grosero pero deberías irte a tu casa ya...— agregué en cuanto ella abrió los ojos y volteó a verme con el ceño fruncido— por favor ¿sí?
—Pero si lo pasamos bien, ¿por qué no te quedas conmigo un rato más y repetimos? Incluso puedo hacer de desayunar si deseas —habló con tono seductor pero negué con la cabeza expresando mi desinterés en su propuesta.
—Disculpa pero no, me ha bastado con una sola vez y ahí se queda la cosa —le dije poniéndome de pie— igual gracias por tu tiempo, te puedo dar £50 libras ¿está bien?—pregunté buscando la billetera que tenía sobre una cajonera.
—¿Pero qué me has tomado por puta o qué?— inquirió la chica y ante mi falta de respuesta se levantó furiosa de la cama— eres un cretino, imbecil, como todo puto hombre en la faz de la tierra.
—En ningún momento te dije que esto fuera algo más que un acostón— me encogí de hombros— Deberías preguntar antes de aceptar irte con un desconocido, pero bueno ¿los quieres o no? —continué extendiendo el dinero.
La chica no contestó nada. Se vistió en un santiamén y antes de poder darme cuenta le estaba dando un portazo a la puerta de mi apartamento.
No me molestaba, no era la primera y posiblemente no sería la última vez que me sucediera aquello. Se podría decir que tenía una tendencia a dejar de ser caballero una vez que obtenía lo que quería.
Despreocupado me dirigí a tomar un baño rápido. Luego, antes de cambiarme con ropa limpia tome mi celular para revisar si había alguna novedad. Entré al correo y descubrí un mensaje interesante que provenía de mi lugar de trabajo, el asunto decía "nueva asignación".
Supe de inmediato qué significaba así que no pude evitar refunfuñar por lo bajo. No deseaba ninguna nueva asignación de nada por lo que mientras tomaba mi traje de marca Hockerty de color azul y zapatos Gaziano & Girling de color negro no deja de pensar cómo iba a hacer para declinar o deshacerme de esa propuesta no solicitada.
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Entre La Ley y El deseo(En Corrección y Editado)
Ficção AdolescenteEn un mundo de crimen internacional, dos corazones se encuentran en medio del deber y el deseo. Abigail Lexington, una agente novata con un legado de la CIA, se une a la Interpol y conoce a Wilson Stell, un agente experimentado y mujeriego. A medida...