Almas gemelas

capitulo tres

Corría desesperado por el bosque, está vez era de día, cuando llegue a lo que parecia ser la parte más profunda del bosque, habia una mesa, mi comida favorita, todo lo que mamá prepara, y de espaldas un chico, me acerque a el y esta vez, pude verlo, era Minho, volteo a verme y sonrió, pude notar sus colmillos y luego lo vi acercase a mi

Me levanté agitado, no grite, voltee a ver mi despertador, ya eran las siete de la mañana, me levanté lo más rápido posible, y me cambié, cuando baje gritando a mi madre, porque no me había despertado, note que no estaba, pero en la sala estaba uno de los amigos de Minho, Hyunjin, en el sofá, con sangre en los labios

— chan — lo ví acercarse a mi, mientras repetia mi nombre
— ¡Christopher !

Me levanté exaltado, todas las miradas de mis compañeros sobre mi, voltee a ver a Minho, quien me miró confundido y luego volteo a ver a su amigo y yo voltee a su lado
El estaba riendo, mientras me veía fijamente

— lo siento — me disculpé con la profesora, por haberme quedado dormido

—¿Que paso ?,¿Que soñaste ? — Félix parecía preocupado, pero al mismo tiempo intrigado
— no lo sé, fue extraño, primero tuve el mismo sueño de siempre, solo que está vez, si me veía la cara, era Minho estoy seguro y luego, despertaba en mi cama, cuando bajaba a la sala, Hyunjin estaba en mi sala con sangre el la boca, se estaba acercando a mi, fue muy extraño

[...]

— deja de reírte — la carcajada de Hyunjin fue aun mas fuerte, Jeongin y Jisung lo miraban confundido
— pero hubieras visto la cara que hizo antes de despertar
— manipulaste su sueño — lo cuatro teníamos diferentes poderes

Claro que con el tiempo teníamos que aprender a controlarlos, el mío era leer la mente, el de Jisung podía ver el futuro, Jeongin, aunque tenía un cuerpo pequeño, tenía más fuerza que nosotros, y por último Hyunjin
El podía adentrarse a los sueños o pensamientos de las personas y cambiarlos, no sabía que estaba soñando chan antes, pero a juzgar por la reacción de Hyunjin cuando la profesora, despertó a chan, sabía que esto era obra suya...