°•El secreto de Bradley•° [Omegaverse]

°•Cap 4•°

Yo no entiendo . . . Como terminé así?

Gotas de vainilla y pétalos de lavando era el aroma que desprendía de la ropa de mi madre, accesorios clásicos y vestimenta de seda, un gusto exquisito para todos que la viesen, su maquillaje suave y su aroma dulce era algo característico en ella, su apariencia brillaba en cualquier lugar, preciosa cual perla y valiosa como diamante, yo quería ser como ella, muchas veces me escabullí a la habitación de mis padres solo para poder agarrar los vestidos de ella, ver su maquillaje y poder tocarlo con sutileza para no dejar marcas ni dañarlo en el proceso, echarme sus carísimos perfumes y verme por horas en el espejo, ella me decia que era el niño mas bonito de la tierra y claramente le creía, pues que madre no ve a su hijo como el mas lindo del mundo.

En cambio, las hojas de menta eran el aroma de mi padre, serio e implacable rigido y presentable, con sed de gloria en todas sus acciones yo también quería ser igual de perfecto en cada acción y suave en mi interior, siendo amable con mis compañeros y duro con mis enemigos, inteligente a la hora de actuar pero cuidadoso con cualquier detalle.

Amo los días de campo, los picnics a la luz del sol, el olor de la comida, la lluvia torrencial aunque sea tan pesada que no me dejará ir a ninguna parte y tan larga que me haría morir del aburrimiento, me gustan los lugares tranquilos, la música clásica y un poco de pop, los libros viejos pero tambien los nuevos, los perros pequeños y la ropa hermosa, sus accesorios y los perfumes caros, las cremas caras y el mejor maquillaje, los deportes, Ho los deportes, yo amaba el patinaje sobre hielo bueno, bueno eso era antes de que todo se fuera al demonio.

Nací en una familia adinerada y que? Sí la tuve fácil pero, el honor y la popularidad no se consiguen solos, sentirme superior a los demás me lo tenía que ganar yo mismo, las mejores notas y el mejor comportamiento, el mejor en los concursos y el más sobresaliente en todo, los comentarios lo eran todo, los premios, los elogios, las miradas y los aplausos yo vivia por eso.

Dar más reconocimiento al apellido Cremanata era muy bien recibido en la familia ya que con cada logró obtenía un premio cualquier cosa que yo quisiese me lo era dado en la palma de mi mano, la mirada de orgullo de mis padres lo era todo para mí, nunca pensé que ellos me estaban protegiendo de lo mierda que puede llegar a ser el mundo con alguien que era más débil que ellos, lo crueles que pueden llegar con tal de hacer daño a esa persona porque querían.

Las veces que iba al colegio no lo notaba, las miradas de mis compañeros me parecían igual a todas tal vez porque no notaba las miradas de mis profesores, o los niños a mí alrededor, la secundaría fue un caos en mi mente, tanto física como mental mis primeras peleas, discusiones, cambios, castigos y mi primer encuentro con el tema del sexo, algo que recuerdo fue la educación de nuestros generos secundarios, las feromonas y todos los temas de protección que debemos tener en cuenta, pero cerca del circulo normal de un adolescente, la preparatoria no era diferente estudios, parejas, discusiones, sexo, problemas, notas, concursos aunque recuerdo mucho un momento en particular fue mi primer contacto con un deporte tan brillante como lo era el patinaje sobre hielo.

Era lo más asombroso que había visto en mi vida, los movimientos, la música, las coreografías y el hermoso vestuario, aunque creo que eso era lo que más me atraía antes de poder practicarlo, recuerdo lo emocionado que estaba la primera vez que fui a mis clases, mis padres me dieron su aprobacion muy rápido una copa mas para su estante me supongo, quede adolorido luego de esa práctica, casi ni podía respirar, mi cuerpo estaba lleno de moretones y raspones, no me importo menos iba a ser todo lo posible para vestir ese hermoso vestuario lleno de piedreria, ahora que lo pienso si me importaba solo lo vistoso que veía, pero luego de todo ese trabajo duro podría participar para concursos grandes, eso me emocionaba, a pesar que no me daba cuenta la gente que tenía alrededor.