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La razón por la que el duque Pellio Borreotti decidió repentinamente adoptar un niño fue muy trivial.

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''¡Mi hijo dijo ayer papá!''

Fue la única palabra que dijo su amigo cercano apenas lo vio.
El Conde Kanis Linee, que que fue padre de su segundo hijo hace dos años, se jactó de lo encantadores y bonitos que eran sus hijos.

Cuando vi a Pellio, me resultó extraño ver a un amigo cercano que se esforzaba tanto en alardear así de sus hijos. Hablar de esa forma haría que salieran los nódulos de las cuerdas vocales, pero era hasta el punto de que era aceptable no derramar sangre ni una sola vez.

Sin embargo, esto también fue posible porque Kanis era Kanis.

El conde Kanis Linee fue una de las pocas personas que pudo acercarse al duque de Borreotti sin dudarlo y tener una conversación honesta con él. Si Pellio era una escarpada montaña nevada, Canis era un campo cálido. A pesar de sus personalidades muy diferentes, los dos se llevaban muy bien.

"¿Pero Pellio, cuándo te vas a casar?"

"...¿Quieres morir?"

"¡Quiero ser tío!"

Kanis difundió diligentemente los méritos del matrimonio y la ternura de los niños. Un burro gordito cubierto de pañales, los antebrazos doblados y una alegre bienvenida por parte de la hija mayor que me recibe después del cansancio. Era más que alardear, estaba casi al nivel de la propaganda.

Normalmente, habría escuchado con un oído y fluido por el otro, pero ese día, extrañamente, no pude ignorar la voz de Kanis. Es posible que haya quedado grabado en mi mente.

"La existencia de un padre es verdaderamente sublime."

Kanis, quien dijo eso, no se veía muy sublime. Más bien, fue en la medida en que las personas caídas eran repugnantes. Antes de casarnos, solía hacer eso cada vez que alardeaba de mi prometida.

''¡Es realmente lindo! ¿Por qué no me crees?"

Pellio, que le tendió una copa para mirarse en el espejo y decir algo así, subió al carruaje. Ese día vi a muchos familiares en la calle y todos parecían felices.
¿Eso también sería bueno?

Pellio, que observaba mientras apoyaba la cabeza contra el alféizar de la ventana, rápidamente cerró los ojos.

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“…¿Entonces me adoptaste?”

Leonie se sintió increíble.

Debido a la repentina decisión de adopción, el carruaje de Pellio todavía estaba detenido frente al orfanato. Loupe había entrado al orfanato y estaba llenando los papeles de adopción, y los caballeros vigilaban alrededor del carro. Mientras tanto, Pellio le contó a su hijastra por qué decidió adoptar.

Adoptar un niño por lo que dijo un amigo.
Durante sus dos años en el orfanato, Leonier había visto adultos que venían a adoptar un niño. Y todos tenían diferentes motivos para querer adoptar. Hace mucho que no tengo hijos, los quiero mucho, vine a servir y me pisotearon los ojos, y parecía un niño muerto.

Una cosa es segura, todos sentían cariño y preocupación por el niño de una forma u otra. Pero no fue el caso de Pellio.

"¿Eres estúpido?"

Era la primera vez que veía un motivo de adopción tan estúpido. Leonie se rió a carcajadas.

"Es tan bonito decir que eres hijo único"

Pellio chasqueó la lengua, no me gustaba la actitud arrogante que tuvo contra mí. Al contrario, era mucho mejor que los niños que había visto antes, mirando el césped y llorando.

Me convertí en la hija adoptiva del protagonista masculino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora