Tuyo

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-¡¿Que dices?!- exclamó el castaño.

-Por favor déjame permanecer a tu lado- repitió el azabache.

Aquino quedó perplejo, estaba apunto de un colapso, y no era de ira, si no era de vergüenza, el chico nunca sintió aquel sentimiento que se describe como amor, mucho menos de un fantasma.

Sentía como la sangre le hervía y se iba hacia sus mejillas, causando un leve sonrojo en aquel chico de ojos miel.

Sentía como su corazón se aceleraba solo con verlo pero ¿Porque tan de repente sentía aquello por el chico de ojos violetas?

-Por favor Aquino-Repitió-Dejame ser tu "I wanna be yours" de los Arctic Monkeys.

-Mierda- pensó Aquino.

I wanna be yours de Arctic Monkeys es una canción que habla sobre el como una persona se entrega completamente a otra persona amándola así de que quiere ser su todo para aquella persona ya que la letra expresa amor, respeto y devoción hacia esa persona, lo cual simplemente como dice el titulo...

-Solo quiero ser tuyo Aquino- repitió.

El castaño estaba impactado, se preguntaba a si mismo ¿Cómo un fantasma va a saber de una canción así?

-¿Como sabes sobre la existencia y el significado de esa canción?- preguntó.

-En tu habitación si la observas muy bien tenía postes de bandas de todo tipo, pero extrañamente este poste estaba debajo de tu cama, creo que se te había caido- respondió Duxo.

-Ah con que hay estaba ese poste-hablo- pensé que lo habían tirado a la basura.

-¿Y porque pensabas eso?-preguntó de azabache.

-Mi mamá las veces que no quiero limpiar mi cuarto lo limpia ella a su manera ¡Una vez limpio todo mi cuarto y quedó demasiado limpio, pero me había tirado una de mis figuras de colección de los Avengers!- explicaba Aquino mientras Duxo prestaba atención atentamente.

-Y además que era mi figura favorita, solo que estaba un poco rota- habló con un poco de tristeza.

-¿Y cuál era esa figura?- preguntó el de ojos violetas.

-¡Era de Iron Man!-respondió sonriente- Además que eso me lo había regalado ella, ¡Nada que un poco de pega lo solucione!

- Si que te gustaba mucho- dijo Duxo.

-Es que eso me lo regaló luego del funeral de mi papá, como no paraba de llorar decidió comprarme eso, además que a mí papá le gustaba mucho ese súper héroe- explico con profundo pesar.

-¿Era como algo muy importante para ti cierto?- pregunto Duxo.

-Si... Pero en fin se que papá y Iron Man están en un lugar mejor-respondió con una sonrisa.

-Si lo están muchacho- contesto Duxo mirándolo fijamente, haciendo contacto visual nuevamente y acercándose poco a poco.

-¿¿D-Duxo??-preguntó Aquino.

-Sabes algo, dejemos el tema para más tarde, llevo bastante tiempo preguntandome como sabrán tus labios-respondió el azabache.

Aquino estaba nuevamente nervioso y mucho más rojo, tenía ese presentimiento de que aquel chico lo iba a besar.

Por otro lado Duxo quería intentar aprovechar la oportunidad, llevaba tiempo intentando hacerlo aunque el castaño no se dejase, pero estaba convencido de que podía hacerlo esta vez.

-¡AMO DUXO!-exclamo entrando por aquella puerta el chico de cabellos rojizos, era el sastre de nombre Andreh.

Aquino estaba asustado pegó un salto para atrás alejándose un poco del azabache.

Por otro lado estaba un Duxo muy enfadado por lo que había pasado, por culpa de Andreh no pudo hacer lo planeado.

-¡LA PUTA QUE TE PARIÓ ANDREH! ¡PARA LA PROXIMA AVISA!- gritó el más bajo, Duxo estaba completamente enojado, Andreh estaba confundido y Aquino estaba totalmente perdido en lo que le acababa de ocurrir.

-¡¿Y QUE HICE AHORA AMO?!- exclamó Andreh bastante confundido como si algo hubiera pasado.

De repente se volteo para atrás viendo a un Aquino en la esquina de la habitación del hospital.

-¡TU! ¿QUE LE HICESTE A MI AMO?-pregunto ahora enojado Andreh.

-¿¿QUE YO LE HICE ALGO??- gritó Aquino también enojado.

-¡Andreh cállate!- exclamó Duxo.

-JAJAJA ¡POR ESTUPIDO!- exclamó Aquino.

-¡Tu también recuerda que estamos en un hospital!-habló Andreh.

-A mí me calla mi mamá no estúpidos como tu-Dijo el castaño.

-¿Cómo me llamaste?, repitelo una vez más si puedes-comentó en un tono amenazante el de cabellos rojizos.

-Es-tu-pi-do- contestó Aquino.

-Ahora si ¡Tu te lo buscaste!- exclamó Andreh para empezar a perseguir a el pobre de Aquino.

-¡No puedes hacerme nada eres un fantasma!-exclamó.

-Cagaste niño-comento Andreh.

Mientras que Andreh intentaba de hacerle algo a Aquino, este simplemente se burlaba de el.

-¡ESTUPIDO!

-¡CÁLLATE!

Duxo se preguntaba que había hecho para que esto pasara.

-Dios que hice para perder aquella oportunidad-dijo Duxo.

Pero... Veo que si acepto la propuesta-concluyo mientras se reía de lo que hacían Aquino y Andreh.

Se fijó en su anillo, y en el de Aquino, viendo a aquel chico que cautivó su corazón y sin pensarlo dos veces que lo había aceptado, tal vez no como se debe pero en el fondo lo ama de verdad.

Ya que si no lo amara de verdad, nunca hubiera ido a aquella tumba, nunca lo hubiera aceptado en su casa, y nunca lo hubiera sonreído tal y como lo ha hecho.

Te amo...

¡Chico fantasma!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora