otra vez ; jenlisa

04

Día siguiente, ya era viernes así que se arregló para salir con Jisoo y Rosé a un bar.

Mientras bailaba y tomaba conoció a Irene, una chica bastante linda con la que se enredo esa noche y la llevo a su departamento pero realmente no pudo disfrutar nada, todo el tiempo tuvo en su mente a alguien más.

Extrañaba tanto en ese momento a Lisa, recordó tantas cosas a su lado, momentos que extrañaba y con esa tristeza se quedó dormida.

Llego el sábado, Jennie no había hablado de esto cob nadie exepto por Jisoo y Rosé pero ya no vivía con sus padres. Le habían comprado un departamento cinco meses atrás argumentando qué necesitaba su privacidad y agradeció tanto que se lo dieran en ese momento porque no quería que vieran como se veía, tenía la cara hecha un asco, los ojos hinchados y comenzaba a sentirse enferma.

Jisoo la llamó y junto a Rosé llegaron con dulces y frituras para pasar el rato, la pareja sabían que estaba de esa manera por su otra amiga pero también creían que fue su culpa por obligarla a salir y era su forma de disculparse, aunque en realidad todo fue culpa Jennie, por otra vez fijarse en la tailandesa y no poder sacarla de su cabeza.

Ese momento se sentía como en los viejos tiempos, solo faltaba la rubia para que las cuatro estuvieran juntas. Jennie deseaba que cruzara esa puerta.

Se quedó dormida en medio de la película, pero una tercera voz ajena a la de sus amigas empezó a hablar era la de Lisa aunque no estaba segura porque seguía adormilada.

— Dejala dormir solo cuidala, parece que le va a dar gripe — Escucho a Jisoo decir, para después escuchar como se despedían ella y Rosé mientras salían de su hogar.

Se volvió a quedar dormida sin saber más.

Después de despertar la tailandesa estaba sentada con su cabeza en su regazo, ahora era ella la que dormía, le puso una cobija y estaba por salir del sofá pero no la dejó.

— Duerme conmigo Nini — Dijo aún entre sueños, penso que lo había dicho al aire, pero cuando intento salir de la habitación volvió a hablar.

— No me dejes Nini, por favor.

Y ella jamás la dejaría, no importa cuantas veces la tailandesa la dejará a ella porque otra vez regresaría con su amada.