Hawks no sabía qué le hizo abrir la boca en ese momento, tal vez fueron los recuerdos que le mostraron, o tal vez fue su lado de héroe entrando en acción; o incluso, y muy posiblemente sus instintos más animales que le hacían querer protegerla lo qu...
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Estaban perdiendo, y no podían hacer nada para detenerlo; no podían ganar está vez, lo sabía mejor que nadie. Esta guerra estaba perdida, ellos ya no podían pelear más, estaban agotados y dispersos por todo el lugar.
¿Que puedo hacer, si seguimos así perderemos tarde o temprano?, Naruto no pudo evitar lamentarse mientras veía a Kaguya volver a lanzar a Sasuke por los aires; ¿Que hago? ¿Cómo podemos sellarla si apenas podemos tocarla?.
Naruto no sabía que hacer, ya llevaba peleando 3 días enteros sin descanso alguno, y apenas se podía mantener al día con esta perra loca, que no paraba de querer ensartarla con una de esas malditas barras que le salían de las manos y el cabello.
¿Que hago?, no pudo evitar pensar la rubia, Si seguimos el consejo del sabio perderemos. Ella no podía ser sellada, no por ellos; no en su estado actual. Puedo usarlo... pensó la rubia con una idea.
— ¡Acércame... tengo una idea que puede detenerla el tiempo suficiente! – le grito la rubia a su compañero quien solo asintió, en señal de acuerdo.
Tiene que funcionar; ese maldito sello tiene que funcionar, tiene que detenerla, intento calmarse la chica mientras corría al encuentro con Kaguya.
— ¡Fuinjutsu - Sello Rojo! – exclamo la rubia, mientras que en su mano aparecía una matriz de sello de color rojo sangre, con la que golpeó a Kaguya en el pecho, aturdiéndola.
— ¡AHORA! – grita Naruto, usando la mano donde tenía el sello Yang, mientras que Sasuke se acercaba rápidamente para completar el sello, hasta que....
— AHHHHH!!!!!!!!!!
El grito de Kaguya los mando a volar a los dos y a chocar con unas cuantas rocas.
Que mierda; fue en lo único que pudo pensar Naruto mientras se levantaba, y ver a Kaguya con lineas negras por todo su cuerpo, como si fueran venas de sangre negra. ¿Que está pasando?, se pregunto la rubia al ver a Kaguya gritando como loca.
— ¡AHORA; NARUTO! – no pudo pensar más al oír el grito de Sasuke, empezando a correr a su encuentro con el Uchiha para por fin acabar con esta mierda y poder descansar.
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9 HORAS ANTES
— ¿Qué demonios? – exclama Naruto.
— Ni eres un salvador, ni esto se a terminado – le dice Zetsu.
