Here To Stay (Harry Potter)

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Desde que tenía memoria Hadar había vivido con sus tíos Narcissa y Lucius Malfoy, quienes decidieron hacerse cargo de él después del encarcelamiento de su padre. Si, el sabía de sobra el tema ya que su querido tío se encargaba de recordarle lo inepto que era al igual que su padre traidor.

Al principio Hadar trató de encajar con la estirada vida de sus tíos y primo, de verdad lo intentó y con todas su ganas, pero siempre terminaba cagándola con algo, siempre rompía importantes decoraciones o muebles de la mansión, fallaba en las tareas que le imponían o peleaba con su primo, peleas que terminaban con Hadar golpeando a Draco al este ser demasiado estúpido y mimado.

No hace falta recalcar que todas estas situaciones concluian con un castigo, estos variaban pero siempre eran cosas crueles como encerrarlo en el oscuro sótano por horas o azotar sus brazos con el bastón del tío Lucius.

Al final Hadar optó por pasar la mayor parte del tiempo encerrado en su habitación y tratando de no toparse a su familia lo cual no era difícil ya que estos constantemente lo evitaban, antes le exigían ir a reuniones familiares para así mantener las apariencias pero con el paso del tiempo dejaron de hacerlo, a tal punto de que muchas familias llegaron a pensar que lo habían votado a la calle.

Esto último era medianamente cierto ya que después de sacar de quizio a los adultos terminaban por sacarlo de la mansión unas horas, las primeras veces que ocurrió Hadar se sentía asustado pero luego optó por caminar hasta la ciudad, la cual estaba a unos kilómetros de la alejada mansión Malfoy.

A decir verdad, estos se habían vuelto los castigos favoritos del joven Black, ya que así podía descubrir nuevas cosas relacionadas con el mundo muggle, siendo su descubrimiento favorito la música. Hadar todavía recuerda entrar a un colorido café, con unos dolares que se había encontrado tirados pidió lo primero que leyó en el menú, un dr pepper mientras de fondo sonaba una increíble canción de Motley Crue "looks that kill", en conjunto con su bebida de cereza eran cosas que nunca había experimentado, algo que nunca había escuchado y probado, cabe recalcar que se volvió adicto a ese refresco?
Pasó toda la semana volviendo al lugar solo para pedir la misma bebida y escuchar la música que el lugar le podía ofrecer, esa fue la primera vez que se había enamorado de algo y quería saber más.

Tuvo la suerte de que un señor se interesara en el, era raro ver todos los días a un niño de 10 años vestido con ropas bastante formales para su edad solo bebiendo dr pepper y escuchando música, así que decidió acercarse, al principio Hadar sintió miedo de él, los muggle nunca le hablaban y menos uno vestido con chalecos de parches y muchos picos, en realidad era una buena persona que solo sentía curiosidad de su soledad.

El señor se presentó como Tony para luego preguntarle sobre su extraña rutina, Hadar consiente del secreto mágico solo le contó que su familia era asquerosa y solía ir al café para escapar un rato de eso, también mencionó su reciente interés por la música, y con ese comentario habló por horas con su nuevo amigo sobre bandas y géneros musicales.

Tony se encargó de explicarle sobre las rocolas y como estas reproducian ese increíble sonido, también le habló sobre como la hacían, le enseñó lo que eran las guitarras eléctricas, los bajos, la batería y miles de cosas más.

Hadar simplemente estaba fascinado con ese nuevo mundo, Tony le habló sobre su tienda de discos la cual estaba a unas cuadras del café, así que cada tarde salía para ir con el adulto y conversar, siempre se sentaba en un banco a lado de la mesa registradora con un dr pepper para escuchar las increíbles historias del Tony joven y su banda de metal mientras una canción todavía más increíble sonaba en el reproductor de casettes.

Empezó escuchando cosas ligeras e históricas como los beatles, rolling stones o black sabbath, ya que según Tony debía comenzar de menos a más, luego le mostró a Motley Crue con quienes estaba más familiarizado ya que en el café siempre ponían glam, del glam con cosas como Guns 'nd Roses, Twisted Sister y Judas Priest pasaron al thrash metal con Megadeth, Testament y por supuesto Metallica.

Poco a poco Hadar se fue convirtiendo en todo un experto en la música, en el metal para ser más exactos, aunque también amaba las bandas punk, siendo Misfits su favorita, siempre le dió curiosidad toda la amabilidad de Tony, al vivir en un entorno violento nunca pensó que alguien podría llegar a simpatizar con el, por eso siempre estaría agradecido con el hombre que sin querer había vuelto soportable su asquerosa vida.

Tony también se preocupaba por el, había días en los que Hadar llegaba a la tienda con moretones en sus mejillas o los brazos azotados y magullados, el señor siempre curaba sus heridas y preguntaba el origen de estas, Hadar era vago con sus historias pero Tony no era tonto y sabía que el pequeño la pasaba fatal en su casa.

El día de su cumpleaños 11 su tan esperada carta de hogwarts llegó, su tío Lucius solo se la entregó de manera fría en informándole que mañana a primera hora saldrían al callejón diagon por sus materiales, Hadar solo asintió para luego salir corriendo de casa e ir con su amigo.

Si esperar nada fue sorprendido por Tony quien lo recibió con un pequeño pastel de chocolate, los dos comieron mientras escuchaban horror business de misfits, era algo sencillo pero con un gran significado para Hadar ya que nunca le habían festajado su cumpleaños, después de comer Tony fue al sótano de la tienda para luego salir con una guitarra stratocaster roja.

-Es algo vieja pero me encargué de que funcionara a la perfección, yo tampoco tuve una gran infancia pero la música me ayudo a hacer mis momentos menos horribles y espero que a ti también te pueda ayudar.

Hadar quien nunca lloraba por su situación, quien siempre se mantenía firme para no mostrar debilidad ante sus tíos se quebró por primera vez, era un llanto de felicidad y a la vez de desahogo.
Tony lo atrajo a sus brazos donde lo dejó soltar todo lo que tenía guardado desde quien sabe cuanto tiempo, el resto de la tarde la pasaron en su primera clase de guitarra.

Al ver lo tarde que era Hadar se despidió pidiendo a Tony si podía guardar su preciada guitarra, sabiendo de sobra que sus tíos la tirarían por ser algo muggle.

Ese día fue el más feliz de su corta vida, a pesar de haber sido regañado por la hora en la que había llegado Hadar se fue a dormir con la linda sensación de importarle a alguien.