Estúpido pomposo,
me das rabia, meloso.
Con tu carisma ruidoso
y tu comportamiento odioso,
me intentaste enamorar.Ahora escúchame, asqueroso,
no seas tan canalla,
que al ritmo que vamos
nos harás separar.Por favor, entiende, genio,
no te deseo odiar,
pero, por favor, amado mío,
no te hagas detestar,
que si lo hago
no habrá marcha atrás.Tal vez debí alejarme... era lo mejor para los dos, la verdad,
pero mi corazón debilucho me obligó a quedar.
Así que, por favor, querido, te lo ruego y te lo pido,
¿dejarás de jugar conmigo de una vez ya?