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Capítulo Catorce

Yoongi sabía que no iba a llegar a la Reserva sin estar profundamente avergonzado. Namjoon le frotaba la espalda suavemente mientras estaba sentado en su regazo. Estaba luchando contra el impulso de vomitar por todo el suelo. El miró tristemente a Moon y a Hoseok. Ambos le sonrieron, sabían que estaba embarazado y habían jurado guardar el secreto. Iban a ser sus protectores, vivirían con el y tenían que saber la verdad. Miró al suelo e hizo un movimiento con la mano hacia ellos. Los dos hombres se levantaron rápidamente. Moon sonrió.

-"Los mareos no son graciosos", gritó Min. No estaba seguro de si él lo oiría con el ruido del helicóptero y los auriculares que llevaban para mantenerse en contacto con los pilotos, pero Moon le hizo un guiño en respuesta.

-"Ya casi estamos allí", dijo Namjoon junto a su oído.- "Sólo aguanta un poco más, Yoon".

El asintió con la cabeza tristemente. Tenia el estómago revuelto, pero no quería vomitar. Se sentiría humillado si los tres hombres lo veían vomitar el desayuno, por no mencionar que los pilotos tendrían que limpiarlo después de aterrizar. Cerró los ojos y eso hizo que la sensación de vomitar empeorara. Sintió el descenso del helicóptero.

Gracias a Dios. Esto casi ha terminado.

El helicóptero aterrizó y el piloto comenzó a apagar los motores. Moon se movió primero, abrió la puerta lateral y saltó. Hoseok salio después. Ellos se separaron y se situaron a ambos lados de la puerta. Yoongi intentó ponerse de pie por su cuenta, pero sus rodillas temblaban y se tambaleó en el instante en que puso su peso sobre ellas. Nam le tomó en sus brazos y lo acunó con fuerza contra su pecho mientras lo sacaba del helicóptero. Hoseok y Moon agarraron a Namjoon de los brazos y los bajaron a los dos al suelo. Yoongi apoyó la cabeza en el hombro de Namjoon y le rodeo el cuello con los brazos. Odiaba los mareos. Nam lo sostuvo con más fuerza contra su pecho.

-"Agárrate a mí", susurró.- "Vamos a llevarte a la cama y te pondré un paño frío en la frente. Te sentirás cien veces mejor ".

-"Gracias", murmuró para Namjoon. -"Eres el mejor".

Él se echó a reír. -"Lo sé. Eres una carga difícil, pero estoy dispuesto a llevarla. "

El sonrió, se sentía agradecido por tenerlo como amigo. Siempre sabía cómo hacerlo sonreír. Oyó hablar Hoseok, pero no se atrevió a levantar la cabeza del hombro de Nam para ver con quién hablaba, todavía estaba luchando contra el impulso de vomitar.

-"Esta un poco enfermo. Pero se pondrá bien. Solo necesita una cama y un poco de tiempo para recuperarse. "

-"¿Es eso cierto?" La voz de Jungkook. Sonaba furioso.

Min se puso tenso cuando reconoció la voz y levantó la cabeza sin importarle las consecuencias. Jungkook estaba a unos cinco metros de el. Él lo miró y después miro a Namjoon y luego su mirada volvió a el. Si las miradas mataran Yoongi sabía que estaría muerto. Su reacción lo confundió. ¿Por qué está tan enojado? ¿Me odia? Evidentemente no me quiere cerca de él. Sus miradas se encontraron y se sostuvieron.

Yoongi observó que el pelo de Jungkook había crecido un poco desde la ultima vez que le había visto. Llevaba su habitual traje negro del NSO sin el chaleco. En lugar de las letras NSO estampadas en el pecho de su camisa, llevaba su nombre. Se veía en forma y hermoso. Yoongi habría pensado que incluso se vería sexy si no fuera por la furia asesina que veía en su expresión. El corazón le dio un vuelco al estar cerca de él.

-"¿Yoongi?" Nam le susurró al oído-. -"Es él, ¿no es así?"

Giró la cabeza y le miró a los ojos. Namjoon lo miró durante un segundo y luego se tensó.- "Mierda".

215◇kookgiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora