capitulo 42 maraton (3/3)

21K 1K 125
                                    

Narra marta

-¿a donde me llevas? - pregunte  removiendome nerviosa en el asiento del copiloto

-ya lo sabras.. - me contesto el ojiazul

-la venda me pica

-no seas quejica, puedes callarte aunque sea los cinco minutos que quedan de trayecto

Y despues de eso el silencio volvio a inundar el ambiente del coche de mi acompañante pecoso

-¿falta mucho?- pregunte tras unos segundos de silencio

No obtuve respuesta por parte de mi acompañante tan solo escuche lo que parecio ser su mano chocar contra su frente en signo de frustracion

-¿ya hemos llegado?

-no

-¿y ahora?

- estoy reprimiendo las inmensas ganas que tengo ahira mismo de tirarte de este coche en marcha asi que por favor tengamos la fiesta en paz

-vale tranquilizate, todo hubiera sido mas facil si no llevara la venda - Espeté y al segundo ya me estaba riendo a carcajadas

-¿y ahora de que te ries?, en serio deberias ir a un psicologo probablemente tengas bipolaridad aguda

-me rio de que esto deberia ser al reves, eres el de cumpleaños por lo tanto tu eres el que deberia llevar la venda y yo te estaria guiando

-las cosas cambian, si te dejara a ti conducir un coche, acabariamos estrellados y en la carcel, suerte que a mi me queda todo bien

-fingire no haber escuchado eso ultimo

-llegamos maldita pesada, ahora esperate antes de....

Tarde, antes de que luke terminara la frase ya estaba con la puerta del coche abierta, aunque como comprendereis es un tanto dificil bajar de un coche con una venda por lo tanto termine dandome de bruces contra el suelo

-que impaciente- dijo el ojiazul acompañado de una risa

Y despues las mismas manos propiedad del mismo chico ojiazul que me habia llevado me ayudaron a levantarme, o mas bien me alzaron como si tan solo fuese una pluma y me volvieron a colocar de pie

-¿me puedo quitar ya la venda?

-quitatela si no acabaras con la cabeza en el estanque

Me desate ansiosa la venda y la quite con cuidado, al principio no vi absolutamente nada, hasta que me fui acostumbrando a la luz y pude apreciar un parque, pero no era uno corriente, ni siquiera se como describirlo era grande y absolutamente precioso

-¿aqui quieres pasar tu cumpleaños? - pregunte mirando al ojiazul

-si, aunque probablemente seguiria siendo el mejor cumpleaños de mi vida tan solo con estar a tu lado

-buen detalle... y ¿que tenias pensado hacer aqui?

-sinceramente lo que surja ¿quieres un helado?

-ya me habias conquistado con el parque pero si insistes.. que sea de vainilla

-marchando

Caminamos hasta un pequeño puesto de helados que hacia esquina y tras comprar los helados nos sentamos en un banco justo en frente del estanque en el que segun el pecoso meteria mi cabeza

-¿jugamos a las diez preguntas?- pregunto con una sonrisa

-vale, empiezo yo - dije con una sonrisa diabolica acompañada de toda mi boca llena de chocolate de vainilla- ¿tienes hermanos?

VIVIENDO CON SEIS IDIOTASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora