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🔞🖤

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- Ahhhh

Sus manos se enterraban en las caderas de la chica, mientras su pelvis chocaba con la de ella con gran ahínco. Sus pezones se encontraban sujetados con unas pinzas, las cuales eran jalados con una delgada cadena cada que él quisiera. Sus muñecas estaban amarradas a la cabecera de la cama. Luego de salir del interior de la castaña, hizo que girara para quedar boca abajo y la levantó para que sus glúteos quedaran en el aire, de una sola estocada la penetró.

Desde su posición podía apreciar la espalda de la joven, marcada por su fusta favorita, sus heridas se habían abierto cuando fue recostada sobre la cama pues la fricción contra las sabanas las abrió, algunas gotas de sangre se deslizaban entre sus muslos, en ellos se encontraban varias cortadas, las manos de Min quedaron tan marcadas por los azotes dados que su piel hormigueaba, la deshidratación estaba haciendo mella en ella pues era la cuarta ronda, pero no podía decir que parara. Unas cuantas estocadas más y llegó a su orgasmo nuevamente.

Min se levantó de la cama, dejando tumbado el cuerpo maltrecho de la chica con la que se había desahogado. Se deshizo del condón y se apresuró a acomodarse su ropa y salir de la habitación.

– Ya sabes que hacer, iré a darme una ducha. Necesito quitarme ese olor a perfume barato.

Con una reverencia Wang permitió que su jefe saliera y poder encargarse del asunto. Con sumo cuidado cubrió a la chica y posteriormente se cercioro del pulso. Con un gran alivio la libero de las herramientas que tenía aprisionado su cuerpo.

– A... agu... agua. Por fa... favor – apenas susurró.

Con rápidos movimientos, fue al mini bar de la habitación y tomo una botella de agua que acercó a los labios de la joven. Su rostro estaba sumamente golpeado, su labio partido por los golpes y por las mismas mordidas que ella se otorgaba por no ceder ante Min. Pues había sido amenazada, no podía decir que se detuviera lo cual aprendió luego de varios golpes en su bello rostro. Wang la tomó entre sus brazos y salió de la mansión para llevarla al "refugio"

Luego de salir, los encargados de la limpieza realizaron su labor, dejando todo sumamente limpio para cuando el jefe decidiera llevar a otro de sus juguetes a la habitación "roja"

Mientras conducía, el celular de Wang comenzó a sonar por una llamada entrante.

– Estoy en camino – dijo sin un saludo de por medio.

"¿Cómo están?"

– La chica presenta signos de deshidratación, está muy golpeada y tiene heridas profundas en los muslos. En cuanto a él... Todo igual.

"Está bien, ve con cuidado. Tendré todo listo para cuando llegues"

Al finalizar la llamada, apretó el volante entre sus manos. Tenía que calmarse, pues debía llegar lo más pronto posible, por el retrovisor contemplo el cuerpo inconsciente de la joven y el dolor es su corazón se hizo presente como hace 5 años atrás.

Al llegar, como lo había prometido ya se encontraban una camilla esperándolos, la colocó sobre ella y la perdió de vista mientras las enfermeras la atendían. Un apretón en su hombro izquierdo lo hizo reaccionar.

– Ella estará bien, llegaste a tiempo.

- Ojalá hubiera llegado a tiempo hace 5 años, ella me necesitaba – respondió con la voz entrecortada.

In the DarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora