PRESA
Jeon Jungkook tenía cinco años de edad cuando su madre le enseñó que no se juega con la comida, tenía diecisiete cuando comprendió que no te encariñas con la comida, fue a sus veinticinco años cuando se percató de que el aperitivo es mucho más delicioso si la cacería que lo precedió fue extenuante.
Einstein dijo una vez que los hombres vivían en la tierra como los peces en el mar, los grandes se comen a los pequeños y Jeon Jungkook nació y creció para ser un pez grande, un depredador en toda regla, el cazador que estaba en la cima de la cadena jerárquica de Minseon College, rodeado de presas.
Por el momento, el casi invisible profesor de Literatura parece ser su presa favorita.
Kim Taehyung es un pequeño corderito, una cosita dulce y nerviosa que lleva ropas dos tallas más grandes que la suya, con rizos castaños alborotados y ojos oscuros adornados por espesas pestañas que se ocultan bajo aquellos enormes y redondos anteojos de marco fino y plateado.
Su presa huele a fresas, a pesar de que el tono tostado de su piel induciría a su imaginación a un aroma diferente, a un sabor diferente.
Jungkook quiere devorarlo.
Todo de él; empezando por su boquita de labios finos y rosados, que permanecen brillantes por algún bálsamo que lo ha visto colocarse cuando cree que nadie lo está mirando.
Jeon Jungkook está quizás un poquito obsesionado con este Kim Taehyung callado y retraído, de palabras escasas y gestos nerviosos que parece estar demasiado inmerso en su mundo de letras para percatarse de que tiene una mirada cargada de segundas intenciones encima.
- ¿Vas a comerte eso?
Es consciente de que aquella pregunta solo es una advertencia de que algún aperitivo de su almuerzo va a desaparecer si no le presta la debida atención a los dedos rápidos de Jung Hoseok, más Jungkook está demasiado concentrado en otros manjares como para preocuparse de su propia comida.
- ¿Vas a dejar de mirarlo como si te lo fueras a comer? Hombre, que Kim es despistado pero los demás sí que podemos ver como te lo comes con los ojos.
Jungkook se gira a mirar de donde proviene aquella vocecita molesta, encontrándose con la pequeña mierda que es su mejor amigo cuando lo interrumpe cada que está en modo acecho.
- No me mires así, que te lo digo por tu bien. Sólo pídele salir o algo, que ya pareces psicópata.
- Me dirá que no.
Jungkook masculla, volcando su atención nuevamente en la figura a unas mesas de las suyas que sorbe distraídamente alguna bebida de aspecto lavanda, observando los alrededores de la cafetería en los que gran parte del estudiantado y algunos profesores comienzan a reunirse.
- Sabes que tengo mi reputación y Kim Taehyung no es de los que se arriesgan, no creo que tenga entre sus planes de vida enredarse con un chico malo. - Hoseok resopló una risa, tosiendo poquito cuando parte de su bebida se desvió a sus vías aéreas.
- Oh, vamos. Tienes que estar bromeando, ¿a quién no le gustan los chicos malos? - Su amigo refutó, robándole otro trozo de kimchi de su plato. - Y respecto a tu reputación, ¿qué tan malo puede ser que todos sepan lo que realmente eres? Estás en tus veintes, es normal que quieras experimentar y no aferrarte a una relación para la que no te sientes preparado.
ESTÁS LEYENDO
PIEL DE CORDERO [KOOKV]
FanfictionJeon Jungkook es consciente del lugar que ocupa en la larga cadena alimenticia de Minseon College: Es un depredador, de instintos agudos que rozan lo espeluznante y un encanto innato del que es difícil escapar. Sus preferencias lo han llevado siempr...