El Obsequio De La Bancarrota.

Capitulo 1: El comienzo de mi desgracia.

- Murió... - Es lo único que logran articular mis labios después de horas en silencio.

Sirenas suenan, pero no logro escucharlas claramente, se sienten tan lejanas... Trato de procesar lo que está pasando mientras veo a personas caminando de un lado a otro por todos los rincones de mi hogar... ¿Hogar? Este ya no es mi hogar, la carta de despedida que dejó mi padre sobre su cama lo dice... Es mucho para procesar, siento un va y ven de emociones que me agobia. Esto es tan irreal ¿por qué no se van todos? Necesito estar sola, necesito pensar... Pero no puedo... Trato de cerrar mis ojos pero el recuerdo de mi padre en su bañera, pálido, con sus ojos abiertos y distantes observando a la nada, sus muñecas desgarradas y el piso del baño cubierto en sangre es lo único que llega a mi mente. Mi respiración se vuelve más irregular a medida que pasan los minutos, siento que voy a estallar.

- Se suicidó... - Lágrimas comienzan a acumularse alrededor de mis ojos, un grito de dolor sale desde el fondo de mi garganta cuando por fin logro salir del trance en el que estaba.

Mis rodillas chocan contra el suelo mientras tomo mi rostro entre mis manos, gemidos y aullidos de dolor son lo único que se puede escuchar por unos minutos en la gran mansión. Podía sentir las miradas de los presentes en mí, sentía su lastima, aunque en este momento me importa muy poco lo que piensen de mí, sin contar que mi apariencia debe ser un desastre. Mi mundo se está desmoronando delante de mis ojos, mientras mis sueños se escurren lentamente entre mis dedos junto con mis lágrimas. Mi padre, mi pilar, mi fiel compañero se ha ido y se ha llevado junto con él la mitad de mi vida.

- Señorita Dafne, por favor, necesito que responda unas preguntas- Un hombre habló a mis espaldas, quise levantar el rostro y verlo a los ojos, pero mi cuerpo no respondía, debe ser un oficial de policía.

- Yo... No creo poder responder, oficial- Dije en un susurro casi inaudible mientras veía mis manos temblar.

-Señorita, debe hacer un esfuerzo -Me ofreció una mano para levantarme y la acepte, de otra forma, no creía poder levantarme sola y seguramente habría pasado allí toda la noche.

Esto debe ser un sueño, todo se siente tan irreal, pero el fuerte latido que martilla en mi pecho me hace ver que esto no es una pesadilla, es el mundo real. El oficial me ayudó a sentarme en los sofás que están en la gran sala.

- Por favor, que sea rápido -Dije.

El oficial hacia preguntas y yo las respondía de forma casi automática, mi mente estaba en otro sitio, no podía dejar de recordar los ojos vacíos de mi padre, la sangre en el suelo, yo tratando de despertarlo... Miré mis manos, en ellas se observaban rastros de sangre coagulada... Es su sangre... Mis pantalones, mi blusa... Estoy bañada en ese sustancia oscura ya seca. Miré a un costado, había un gran espejo que estaba a mi lado derecho y pude ver mi reflejo, un rostro demacrado, bañado en lagrimas, con ojos tan vacíos como el cuerpo que había visto hace unas horas me devolvió la vista, sin lugar a duda alguna me veo fatal.

- Bueno, creo que eso es todo lo que necesitamos por el momento. No descartamos el asesinato, pero todo indica que fue suicidio. Si el cuerpo de investigación necesita alguna otra cosa me estaré comunicando con usted - Asentí, aunque poco convencida.

El oficial se marchó junto con el cuerpo de investigación y por fin el bullicio que había en esta gran mansión se disipó, quedando en su lugar el cantar de un búho en el jardín, haciéndome recordar lo sola que me encuentro en este momento de mi vida. Decidí subir a mi habitación, necesito quitarme toda esta sangre seca que tengo pegada en la piel, ese olor metálico y nauseabundo hace que me den ganas de vomitar, no puedo seguir viendo eso en mí, siento que voy a desmayarme si paso un segundo más con esa sustancia en mi cuerpo.

Gracias a las malas inversiones de mi progenitor desde hace un par de años, es que llegamos a esta situación... ¿Cómo una persona tan rica puede acabar en bancarrota en un par de años? Mi padre era el magnate más acaudalado de toda Escocia, dueño del "Grupo Mira" tenía empresas e inversiones de todo tipo, incluso tenía oficinas en un par de países en la unión europea y Estados Unidos, así como tierras productivas con cultivos y ganado en Escocia... Pero... La desgracia tocó nuestras puertas un 7 de Marzo. Cuando estábamos en los más alto, en la cima del éxito, una llamada a las 2 de la tarde nos bajó de esa nube idealizada en la que estábamos; Gael, mi precioso hermano mayor había muerto, un choque en un ensayo para una competencia de formula uno nos lo arrebató, desde ese instante, nuestro mundo comenzó a decaer.

Mi madre, una mujer tan fuerte como el acero empezó a enfermar meses después de la partida de mi hermano, un año después su salud empeoró a tal grado que fue recluida en un centro especializado en Miami, una isquemia cerebral la dejó en coma hace una semana atrás. Mi padre empezó a alcoholizarse y a tomar muchas malas decisiones tanto en los negocios, como en la vida personal, vendiendo gran parte de sus acciones para costear los costosos tratamientos de mamá, pero nada funcionó, los doctores no encontraron causa alguna para todos los síntomas de mamá, los raros tratamientos nunca surtieron efecto y... Hoy estoy a poco de perderla también.

Entro al baño y una oleada de recuerdos me invade, mi respiración se acelera y mis ojos lagrimean, siento que el aire se escapa de mis pulmones y no puedo respirar con normalidad... Cierro mis ojos y aprieto mis manos entre sí tratando de calmarme, respiro profundamente y entro rápidamente a la ducha, quito las prendas de ropa que hay en mi cuerpo (más tarde las tiraré a la basura) y empiezo con el baño.

No sé cuánto tiempo ha pasado desde que entré a la ducha, pero el tragaluz que está sobre mi cabeza indica que pronto amanecerá. La piel de mi cuerpo está roja e irritada gracias a la brusquedad con la que he pasado la esponja de baño en busca de quitar cualquier rastro de sangre seca de mi cuerpo, me he hecho algo de daño en el proceso. Salgo del baño y me cambio con ropa de cama, trataré de dormir un par de horas, aunque dudo que logre descansar en paz.

+++++

NOTA:

¡Hola! Espero te guste el primer capitulo de esta intrigante historia. El velo que cubría los ojos de Dafne por fin se levanta y está a un paso de estrellarse contra el mundo cruel, mientras que una inmensa nube de oscuridad amenaza con devorarla. Ansío convertir esta trágica historia en tu novela favorita, no es sin más, me despido.

PD: No olvides de votar y comentar ¡Besos!

𝕾𝖆𝖐𝖚𝖚𝖗