Capítulo 3
Me di un pequeño recorrido por los dormitorios del grande edificio y al final de un pasillo se encontraba el dormitorio 205, era el mío. Intenté entrar y cuando abrí la puerta estaba una pelirroja de ojos verdes sentada en una cama del lado derecho del dormitorio
no me limite a saludarla, solo deje mis cosas en la cama del otro lado del dormitorio pero sentía su mirada fría y callada en mi.
Sentí la incomodidad y rompí el silencio con una voz algo molesta y sin voltear a ver a la pelirroja -siento tus miradas... podrías parar de verme?- no era un tono amable, solo un poco de molestia
-no te estoy mirando- dijo la pelirroja, no pude comprobar si era cierto o no, pero era muy notable por su tono algo improvisado
-desde que llegue aquí me has estado mirando mal, ¿tienes algún problema conmigo?- mi voz no era amable pero tampoco grosera, trataba de ver cuál era su problema, pues desde que llegué se limitaba a hablarme bien o siquiera saludarme-
-Bien-hizo una pausa y la pelirroja se levantó de la cama- si tanto quieres saber cuál es mi puto problema te lo diré.-Confesó- mi problema contigo es que no quiero tenerte como compañera. Eres molesta e invades mi espació.-La chica frunció el ceño y arrugó la nariz en forma de disgustó-
yo solo me cruze de brazos y la mire algo molesta, ¿Cómo se atreve a decir eso?.
-Eres una engreida, se que no te agrado pero no me interesa. Deberías irte mejor tu de la habitación-Yo no era grosera, pero Ellie me sacaba de mis casillas-
La pelirroja solo se quedó callada un momento -bien...- guardándose todo el enojo, con un movimiento brusco agarro su mochila y salió de la habitación con un portazo tras ella.-
Yo solo me quedé callada viendo la puerta que recientemente había sido azotada con odio, después me despejé y seguí desempacando las pocas cosas que traje
Dos horas después la pelirroja no había vuelto. Me desconcertó un poco, pues no pensé que la "pelea" le afectaría tanto como para irse, admito que en ese momento no pensé mis palabras pero era necesario.
Queria ir a buscarla, pero mi ego era más grande y me lo impedía.
Decidí ir a acostarme, pero de alguna forma no podía sacármela de la cabeza.
Quería que volviera, pues ya era algo tarde y podría meterse en problemas y solo me quede por horas viendo al techo, finalmente me dormí, no sin antes de tener esa esperanza de que Ellie volviera.
A la mañana estaba más nerviosa de lo normal, la pelirroja no estaba por ningún lado así que decidí ir a preguntar
Fui a una habitación donde había una chica, se que es amiga de Ellie. Toque la puerta, apenas estaba extendiendo mi mano para volver a tocar la puerta y alguien abrió la puerta. Era una castaña teñida con mechones azules, alta y ojos marrones, Se llamaba Hannia. -qué pasa??- dijo ella abriendo la puerta mientras se acomodaba un poco el pelo que se resbalaba por su cara, era notable que estaba durmiendo. Baje mi tono de voz y la mire de pies a cabeza, como si estuviera analizandola -sabes algo de... Ellie?- en mi cara se notaba una cierta preocupación por saber dónde estaba la pelirroja.
-¿De Ellie?..-esta vez era la chica quien preguntaba, asentí de arriba a abajo y la mire- Ouh, bueno, no la veo desde hace 3 días, lo último que hablé con ella fue que iría a comer.-Dijo honestamente-
-Esta bien, gracias..-di una sonrisa ladina- cualquier cosa me dices, si?.-la chica asíntio en forma de respuesta-
En ese momento una voz se escuchó proveniente de la habitación de Hannia, ambas volteamos al mismo tiempo solo para ver a una chica despeinada de cabello castaño corto y ojos cafés- ¿sucede algo?- dijo en una voz adormilada
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Si te pierdes en la oscuridad busca la luz
Romantikconoces a una chica de 19 en un apocalipsis zombie, eres la única que la ayuda y comienza un romance con ella. Sin embargo empiezan a tener unos problemas