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Asher estaba muy concentrado viendo a Husker. Ese gato alcohólico, apostador, adicto, bueno para nada, flojo y poco amable al cual quiere mucho sabía cosas de Alastor. Era su secuas y confidente y el quería saber absolutamente todo de su venado

No sabia como, pero lo iba a descubrir aunque le costará un par de gritos del rojizo pero lo soportaría.

Con una calma claramente falsa y una sonrisa obligada se acerco al viejo gato con una mirada llena de intensidad.

- Tío Husk... ¿Qué tal si me das un whisky?

Pregunta mientras se recarga en la barra, su mirada era tan intensa que se podía sentir como taladraba el interior del encargado de ese bar.

Husk lo miro con calma y una ceja alzada en interrogación. Sentía como su pelo se esponjaba y una corriente llena de nervios lo recorría. Ese niño no tenía buenos planes - nunca los tenía - cuando se acerca a el.

Con un suspiro irritado camino y sirvió el vaso de whisky antes de dárselo al joven muchacho quien ya estaba muerto. Le gustaba recordarlo, al igual que le gustaba recordar que Alastor también perdió su vida, le daba una satisfacción enorme que al poco tiempo se borraba cuando dichas personas mostraban que tenían el control de cualquier lugar que pisaran, y sobre todo, de cualquier persona.

- Toma y deja de joderme el día

Respondió mientras bebía de su botella. Era la cuarta em estas dos horas, no se arrepentía para nada pues estar en ese hotel era peor que estar sufriendo de las llamas y el horrible calor que había en el infierno.

Asher sonrio mientras parpadeaba pausadamente, mirando al hombre frente a el con ligera irritación. Se obligó a controlarse, no podia darse el lujo de arruinar sus planes en estos momentos.

- Escuche que tu sabes cosas de Alastor. Quería que me dieras un poco de información de el - Dijo mientras golpeba la barra con sus dedos, viendo con intensidad al "buen" hombre - Podemos hacerlo... entretenido.

Dijo mientras movía su mano para que aparecieran 4 botellas de licor barato, un juego de cartas y unos dados. Sonrio con soberbia mientras lo miraba.

- Todo esto puede ser tuyo Husk. Solo tienes que decirme lo que quiero

Le comento mientras su mirada parecía brillar en algo parecido a advertencia. Husk miro las cosas en la mesa y luego lo miro, golpeó la mesa y lo señalo con molestia.

- ¿Tu quieres comprarme a mi? ¿Crees que puedes hacerlo con algo de licor y un par de cartas de poker? - Dijo mientras gruñia con molestia - Pues si, si puedes.

Contesto al final tomando una de las botellas y abriéndola para beberla con calma. Lo miro fijamente mientras se apoyaba en la barra

- ¿Que quieres saber de él?

Asher sonrio mientras bebía de su whisky y ladeo la cabeza soltando un risa que podías sentir que calaba en tus huesos.

- Absolutamente todo, no guardes secretos

Venado rojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora