Jay es un joven CEO millonario de Corea del Sur. Él está casado hace dos años, su familia es una de las más prestigiosas no solo de la ciudad sino también del país.
Mientras que yo pertenezco a una pequeña familia y soy hija única, mis padres tienen una granja a las afueras de la ciudad de Mungyeong, nuestra familia es humilde y yo siempre ayudo a mi familia en la granja.
Hasta que un día, por accidente, mientras estaba en la gran ciudad de Seúl choqué contra el cuerpo de aquel jóven mientras caminaba un poco perdida por las calles bulliciosas del centro.
—¿Estás bien?—
Sus ojos castaños se fijaron en los míos y sentí mi corazón latir con fuerza mientras lo miraba.Lo miré sintiendo mi respiración atascarse en mi garganta.
Era el hombre más guapo que había visto jamás, alto y muy guapo. Sentí mis mejillas sonrojadas y hablé.
—Sí, estoy bien. Lo siento mucho, señor.—
Dije suavemente haciendo una pequeña reverencia como disculpa.No pude evitar sonreír al ver lo linda que se veía cuando se sonrojó.
—Oh, no, no, por favor no te disculpes. Soy yo quien debería disculparme por no mirar por dónde iba.—
Dije con una risita.
—Por cierto, mi nombre es Jay.—
Agregué extendiendo mi mano para un apretón de manos.Sonreí amablemente y apreté su mano.
—Me llamo Eunji.—
Dije suavemente mirando sus ojos.
En cuanto escuché su nombre, sentí una descarga eléctrica recorrer mi cuerpo. No podía creerlo: Eunji, la mujer con la que había fantaseado en secreto durante años, estaba parada frente a mí. Mi corazón se aceleró mientras miraba sus hermosos ojos.
—Eunji... eres realmente tú.—
Susurré, mi voz temblaba ligeramente. Extendí la mano y tomé suavemente su rostro entre mis manos, estudiando cada centímetro de sus rasgos como si los estuviera memorizando.
—Te he extrañado tanto...—
Mi confesión quedó suspendida en el aire mientras esperaba su respuesta, mi futuro pendía de un hilo. ¿Me rechazaría de nuevo o este encuentro casual finalmente nos uniría?Lo miré con confusión.
—Yo... no sé de qué hablas, tal vez... me has confundido.—
Dije suavemente sin comprender a qué se refería.Mi corazón se hundió, pero me negué a rendirme.
Sabía la verdad: que Eunji y yo compartíamos un vínculo profundo e inquebrantable. Agarré su mano con fuerza y le supliqué.
—Por favor, Eunji, recuérdame. Recuerda el amor que compartimos.—
Rogué, con la voz quebrada por la emoción.Estábamos destinados a estar juntos, destinados a encontrar el camino de regreso el uno al otro.
Esto no es una coincidencia: el destino nos ha unido nuevamente por una razón.La miré a los ojos con toda la intensidad y pasión que sentía en mi alma.
—No sueltes mi mano ahora, Eunji. Aférrate a mí y recuperemos todo el tiempo perdido.—
Susurré, mi aliento mezclándose con el de ella mientras esperaba su respuesta, todo mi ser anhelando la suya.
Miré sus ojos sintiendo mi corazón latir con fuerza.
—Es que... lo siento, no te recuerdo.—
Dije analizando su mirada.
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Reencuentro Destinado - Jay Enhypen
Short StoryJay, un joven CEO millonario de Corea del Sur, y Eunji, una humilde chica de granja de Mungyeong, compartieron una profunda amistad y un amor infantil antes de ser separados por la vida. Doce años después, un encuentro inesperado en las bulliciosas...