Isabella era una chica como cualquiera una viva común sin preocupaciones una vida normal, claro eso ella pensaba era tan distraída que nunca se dio cuenta que había una persona que la miraba desde las oscuridades, esa persona que estaba obsesionado...
-Me levante lo mas rápido posible y fui corriendo a la puerta y comencé a gritar mientras golpeaba la puerta- SEBASTIAN! PORFAVOR! ME VOY A COMPORTAR SERE BUENA ESPOSA! TE LO PROMETO!
-En cuanto cerré la puerta subí a mi recamara a tomar una ducha ya que mi padre insiste en tener una platica acerca de negocioso, salí de la ducha artificial, me puse uno de mis mejores trajes-
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-Sali de mi habitación para ir directo a la salida para subirme a mi auto y manejar hacia la casa de mi padre, al llegar los ayudantes de mi padre me dieron la bienvenida.
-Al entrar a la oficina de mi padre me saludo y tome asiento-
Don Giovanni: Sebastián ya es tiempo que tomes tu lugar como miembro de esta familia, Sebastián es tiempo de que te cases con Chantal . Es una alianza que fortalecerá nuestra familia y nuestros negocios
-Con frustración hable- Padre no lo voy a hacer! yo no la amo, me importa una mierda que el negocio se jode, esto no es justo para mi ni para ella.
Don Giovanni: -Golpeo la mesa- No se trata de amor! Esto es por el bien de la familia ¿Crees que yo me case con tu madre por amor? No, lo hice por los negocios y por nuestra familia y mira ahora donde estamos! gracias a ese matrimonio! tu mismo lo tienes que hacer quieras o no!
-mirando hacia la ventana, tratando de calmarse- Pero, padre, estamos en otros tiempos. Yo quiero casarme con alguien que realmente ame, al en con quien quiera pasar mi vida, no quiero estar alado de alguien que no amo!
Don Giovanni:-levantándose y caminando hacia Sebastián -No seas ingenuo. El amor es un lujo que no podemos permitirnos. Chantal viene de una familia poderosa y respetada. Esta unión nos dará más fuerza y protección.
-mirándolo a los ojos-¿Y qué pasa con lo que yo quiero? ¿Mi felicidad no importa?
Don Giovanni: -cruzando los brazos- Tu felicidad vendrá del respeto y la seguridad que esta unión nos dará. A veces, debemos sacrificar nuestros deseos personales por el bien mayor.
-Con voz baja pero firme- No puedo hacerlo, padre. No puedo pasar el resto de mi vida con alguien a quien no amo y no lo pienso hacer
Don Giovanni: -suspirando profundamente, con una mezcla de frustración y decepción- Sebastián, a veces hay que tomar decisiones difíciles. Yo esperaba que fueras más fuerte, más parecido a mí y mirate solo saliste siendo un niño inmaduro
-con determinación- No soy tú, papá. Quiero hacer las cosas de manera diferente.
Don Giovanni: -mirándolo con dureza- Entonces, te enfrentas a una decisión, hijo. O haces lo que se espera de ti, o te apartas de la familia y afrontas las consecuencias y te quitaré todo el dinero hasta dejarte en la ruina.
-dudando un momento, pero luego levantando la cabeza- No puedo casarme con Chantal. Prefiero enfrentar las consecuencias.
-Don Giovanni lo mira por un largo momento, su expresión un reflejo de años de dureza y sacrificio.- con voz baja y amenazante- Entonces, que así sea. Pero recuerda, fuera de esta familia, no hay protección. Estás solo.
-Sebastian asiente lentamente, sabiendo que ha tomado una decisión que cambiará su vida para siempre.
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