Isabella era una chica como cualquiera una viva común sin preocupaciones una vida normal, claro eso ella pensaba era tan distraída que nunca se dio cuenta que había una persona que la miraba desde las oscuridades, esa persona que estaba obsesionado...
.-Desperté después de unas horas, estaba en una habitación diferente no la había visto antes, estaba segura que Sebastián me había dejado aquí, ya que seguía sin mi ropa me levante para buscar una salida me percate que había una ventana, en cuanto la vi busque algo de ropa para ponerme, camine a la ventana ya con la ropa puesta no estaba tan alto, para mi fortuna la ventana se podía abrir, mire para abajo y vi que había una alberca, a lo lejos había un bosque así que empecé a amarrar las sabanas para hacer una cuerda y escapar, amarra un pedazo en la pata de la cama, baje con cuidado ya que no sabia donde estaba Sebastián, baje y corrí a el bosque, para mi mala fortuna Sebastián estaba en el bosque en una fiesta disparándoles a los animales y a unas personas que parecía que las había secuestrado para usarlas como diversión, seguí corriendo por mi vida ya no quería seguir estando con el, no sabia cuanto tiempo llevaba con el, escuche como le gritaron a Sebastián que me había escapado corrí mas rápido para evitar que me alcanzara, pero era en vano me di cuenta que no era u bosque como tal, ya qué había una barrera alta y con demasiada seguridad, en ese momento empecé a correr a otro lado vi como varios hombres venían Asia mi, de un de repente vi a Sebastián en frente mío y me sonrió.
.-A donde ibas pequeña perra -me soltó un golpe en la pajilla poniéndola color carmesí, me metió a la casa donde me tiro a el suelo para golpearme hasta el punto que mi cara ya no estaba reconocible- CUANTAS VECES TENDRE QUE HACER ESTO? -Me golpeo en mi abdomen y en mi intimidad, me galo del pelo hasta llevarme a una habitación donde solo había un colchón en el suelo, una almohada y una sabana.
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.-Te queras aquí no vas a comer hasta que yo lo diga, no usaras ropa y si vuelves a escapar te lo juro que te llevare a un burdel donde no vas a poder escapar -Cero la puerta y escuche como ponía llave a la puerta ,comencé a llorar desesperada, ya no quería seguir con ese idiota, me acosté en el suelo llorando y mirando que no tenia escapatoria..
.-Después de un rato fui a ver a isabella, abrí la puerta y la mire en el suelo dormida, la puse en la cama para después llevar un mueble, de ese mueble saque pañales y toallas húmedas, comencé a limpiar sus partes y ponerle un pañal como si fuera un bebe, recogí todo y le puse un biberón con leche en el suelo al igual puse una papilla en un plato.
.-Desperté y mire que tenia un pañal puesto como si fuese una bebe, me quite el pañal y me quede acostada en la cama, la puerta se abrió y era Sebastián, se acerco a mi para golpearme de nuevo como de costumbre, trate de empujarlo con todas mis fuerzas pero fue imposible, era obvio el era mayor y no había sido violado hasta no caminar.
.-TU QUIERES QUE TE MANDE A EL BURDEL VERDAD!
- me puso una blusa y me cargo como un costal de papas, bajamos y mee subió a el carro donde se subió y el chofer manejo, no sabia a donde iba, estaba asustada mientras Sebastián hablo por teléfono, paso media hora y me di cuenta que habíamos llegado a un burdel, comencé a decirle que me iba a portar bien lo cual Sebastián no escucho, unos hombres bajaron del carro y me metían a una habitación mientras gritaba para que no me dejaran hay mire como le dieron un maletín a Sebastián, me aventaron a el suelo dejándome sola, después de un rato 4 hombres entraron y me empezaron a acorralar, sabia que me querían hacer algo, me amarraron para romper mi ropa y comenzar a violarme todo el día, hasta que me hicieron sangrar de mi intimidad me dejaron, uno de ellos trajo a una señora gorda de unos 50 años o mas, esa señora me hizo cosas peor que Sebastián, me dejo traumada mas de lo que ya estaba, en el suelo había pedazos de mi piel, mis senos mordidos sangrando, mi intimidad sangrando, mi trasero ni se diga... esa señora me hizo poner mi cara en su intimidad haciéndome que le pasara mi lengua por su intimidad, fue lo mas asqueroso que pude a ver echo, me arrastre a el colchón viendo la sangre, pasaron 2 semanas donde todos los días esa señora me violaba junto con cinco hombres, parecía una muñeca, no me movía, no hablaba, quería escapar pero no podía ya que ya había escuchado como mataban a los que se intentaban escapar, después de que me violaran escuche que la puerta se abrió, yo estaba en la pared recargada llorando, para mi sorpresa era Sebastián con una sonrisa en su cara, se acercó a mi y me tomo el mentón.
.-Veo que te gusta este lugar, pero es tiempo que te vallas de nuevo conmigo princesa -no dije nada estaba traumada y confundida al escuchar lo que me dijo Sebastián, me cargo, salimos de hay y me subió a el carro para subirse después y manejar, sentí algo de paz al saber que ya no volvería a ese lugar, me recargue en el asiento y me quede dormida sabiendo que ya no volvería, pero claro volvería con Sebastián donde sufriría de nuevo...
