𝑻𝑯𝑰𝑺 𝑳𝑶𝑽𝑬 || Hayley Anderson vive una vida llena de peligro, pero cuando se trata de poner a sus amigos a salvo, daría hasta su vida por ellos, es por eso que cuando se dió la noticia de que hay una nueva criatura sobrenatural en Beacon Hill...
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THIS LOVE ☾
————♡——–— ( chapter four ) ･₊˚ kanima･₊˚
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—Volverán, así que no tenemos mucho tiempo —nos dice Deaton mientras abre uno de los frascos.
—¿Qué es eso? —le pregunta Scott, ya que el veterinario comenzó a acercar un algodón hacia el.
—Es alcohol —le responde el mayor—, para que no se te infecte. Sanarás bien, pero no tan rápido, por que es de Derek.
—No quiero sonar grosera, pero, ¿cómo sabes de todo esto?—le pregunto mientras me recargo en una de las camillas— De hecho ¿Cómo sabes de que se trata?
—Es una larga historia —me responde—, lo que te puedo decir, es que conozco a los que son como Scott —le pone una gasa en su herida, y con su boca corta un pedazo de cinta—. Puedo ayudar, a los que son cómo el.
Al estirarme para poder recargarme mejor, siento una sensación en mi mano, y al girar mi cabeza veo un cuerpo totalmente desgarrado, y con rasguños en todas partes de su abdomen y estomago. Suelto un pequeño grito, y doy un brinco hacia atrás.
—¿Y esta que criatura fue? —pregunto con asco, mientras que con un trapo limpio mi mano de sea lo que haya tocado.
—No lo se, pero los Argent si —Deaton me responde—, y esa es la parte crucial. Tendrán algún... registro, o libro, con todas sus descripciones, historias, y notas, sobre todo lo que han descubierto.
Scott suelta un sonido de sorpresa.
—¿De qué tanto estamos hablando?
A lo lejos escuchamos cómo un coche se detiene afuera de la veterinaria, así que rápidamente mi amigo y yo nos metemos a un pequeño almacén.
Por el rabillo del ojo, logro notar cómo el señor Argent y un cazador de ellos entran a la sala, y seguido de ellos entra el abuelo de Allison: Gerard.
—Scott, ¿de que hablan? —le pregunto en un susurro, intentando saber sobre lo que están hablando allá afuera.
—Shh, aguarda —me hace una seña para que guarde silencio.
Y no me volvió a decir nada.
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