Límites

73 11 0
                                    

Nunca fueron tan rápidos.

Nunca habían sentido la necesidad de   auxiliar a alguien de esa manera.

Nunca imaginaron que llegaría ese día.

Tras una larga búsqueda, al fin, Qin Shin Huang había vuelto con Sasaki Kojiro.

Todos en la mansión, bajo el mandato de Brunildha y Adán, contribuyeron en el rescate.

A pesar de la insistencia de los demás, la terquedad prevaleció. Qin llevó al japonés a la habitación en el segundo piso. Varias valkirias, principalmente Hirst, se quedaron a atender las heridas del humano.

-Esto.... es...- trató de decir sin quererlo. Las marcas, los rastros de sangre que surcaban algunas partes de su cuerpo pero sobre todo en sus piernas.  Su compañero mostraba signos de violación.

-¡Miserable! - gritó en sintonía con las miradas de las demás guerreras. Su versión estruendosa se alejó del humano en dirección a la apuesta - Voy a matarlo!!!!

-Espera, Hirst - la mencionaba vió al dueño de la voz - Hermes está con él. Regresaré a ayudarlo - dijo el emperador.

-No puede hacerlo - interrumpió Brunildha - les diré a Hércules y a Thor que vayan hacia allá.

-¿Por qué? - dijo algo molesto

-El Olimpo es impenetrable. Muy pocos pueden entrar y debes imaginar que los humanos no son bienvenidos - finalizó.

Hirst negaba con la cabeza tratando de calmarse. La prioridad era cuidar a Sasaki.

-Debemos estar preparados - sentenció el emperador para salir de la habitación y buscar a los demás.

---------------------------------------------

-Al fin todo ha acabado - dijo el semidiós en el salón principal. Con una sonrisa - ya encontraron a tu hermano. Es una gran noticia.

-No debería decir eso, Dear God - respondió Jack serio mientras veía al emperador bajar por las escaleras.

-Sasaki ha vuelto. Tú mismo los viste. Eso es una buena noticia pero... ¿Hay algo que deba saber? - preguntó al notar que su ex rival miraba al recién llegado.

Por alguna razón, sentía que Jack estaba pensando en algo.

-Está inestable - señaló el asesino - aunque Sir Sasaki está con nosotros, my Emperor no mantiene sus colores normales y me temo que se debe a aquel dios- Hércules vió hacia el einherjar chino.

-"¿Aquel dios?... Un cambio en las emociones"- pensó el semidios.

De pronto, recordó lo que nadie había preguntado hasta ahora - Poseidón.......El ....- repetió Hércules - Te refieres a ...

Antes de poder terminar, el emperador ya se encontraba cerca de ellos.

-Jack y Heracles  es bueno verlos. Pero Brunildha está buscándote, semidios - dijo sin demora.

-¿Ha sucedido algo? - cuestionó el semidiós.

-Sasaki está siendo atendido. Hermes está con Poseidón hasta que el resto  de los dioses llegue. Sin embargo...- un breve pausa - dirigió su vista hacia la entrada -...eso no es todo. Al parecer Zeus está preparando algo en el Olimpo. Brunildha quiere que vayas con Thor hacia allá.

-Zeus... Lo entiendo - dijo Heracles alejándose de los humanos - ten cuidado, Jack - comentó como despedida.

El asesino asintió. Luego, miró al gobernante en silencio. Las fluctuaciones en su interior estaban indomables.

¿Por qué?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora