🥀Frágil🥀 [Liskook]

IV

—Jungkook se ve bastante decaído —remarcó lo último la pelirroja, mirando con atención a Lisa, quien soltó un suspiro abrumador al escucharla.

Las chicas estaban reunidas en casa de Rose, organizaron un día solamente para ellas, querían conversar sin limitaciones, ponerse al tanto de lo que pasaba en sus vidas. El ambiente se tornó tenso cuando Jisoo sacó el tema de Jungkook, y no era para menos, apenas había pasado una semana desde el encuentro de Lisa con el Castaño.

—Lo sé, también lo he notado —respondió, manteniéndose cabizbaja.

No creía que le estuviera afectando tanto. Se suponía que ambos estarían mejor con esa decisión, después de todo fue Jungkook quien optó por alejarse, ella solamente estaba respetando su acuerdo.

—Todas nos hemos dado cuenta. Él pobre apenas puede mantenerse de pie, realmente está pagando por su mala decisión —contestó Iu.

—¿Has vuelto a hablar con él, Lisa? —preguntó nuevamente la mayor de todas, sin entender que estaba metiéndose más de la cuenta en el asunto.

—No realmente, él me pidió espacio y yo se lo estoy dando.

—Creo que ahora está pidiéndote a gritos que lo ayudes.

—Quiero ayudarlo, pero él me pidió privacidad, no quiero confundirlo aún más.

—Jimin me dijo que él te necesitaba, que se arrepentía de haber terminado contigo —dijo Rose, temía estár siendo entrometida, pero quería ayudarlos, podía notar que ambos estaban sufriendo, probablemente la pelinegra lo hacía en silencio. Tal vez diciéndole aquello la impulsaría a arriesgarse y darle otra oportunidad—. Él realmente está preocupado por Jungkook.

—También me lo dijo —respondió con pesadez—, pero él tomó esa decisión y no hay vuelta atrás.

—No seas tan dura, Lalisa, todos cometemos errores —respondió Jisoo con un tono más duro, logrando incomodar a la Tailandesa, pues no le respondió.

Parecía que estaba reprochándole que Jungkook estaba sufriendo por culpa suya.

—Pero ese error provocó que Lisa no dejara su habitación en tres días —respondió duramente Jennie, lanzándole una mirada de desagrado a la peliroja—. No olvides eso, Unnie. No trates de hacer sentir culpable a Lisa, porque claramente no lo es.

—Lo sé, perdón —contestó avergonzada—, pero mira como está él ahora, ya está pagando las consecuencias.

—Pues así tenía que ser.

Lisa analizó la situación. Ambas tenían razón, ella había sufrido la ruptura de inmediato, y puede que Jungkook también, ahora ella lidiaba con ello, pero al parecer Jungkook no podía hacerlo del todo. Lo amaba, y quería que él fuera feliz, pero no la estaba pasando nada bien.

—Hablaré con él —avisó de repente, sorprendiendo a sus amigas—. Jungkook me necesita, Jisoo Unnie tiene razón, se equivocó y ahora está perdiendo la cabeza por ello. Nos provocó dolor a ambos, pero lo amo y no soportaré que esté sufriendo.

—¿Cuándo irás a verlo?

—Hoy mismo —se puso de pie, con la atenta mirada de las demás. No dijo nada más y caminó hasta su habitación. Tomó una chaqueta de su closet, su celular estaba sobre la cama, así que extendió su brazo hasta tomarlo y lo guardó en el bolsillo de su pantalón.

—¿Segura que quieres hacerlo? —la voz de Jennie se escuchó desde la puerta, la había seguido.

—Sí —respondió, girando su cuerpo en su dirección para verla. Jennie tan solo dejó salir un suspiro, sabía que no estaba contenta con su respuesta.

—Solamente te pido que pienses, Lili —habló con tranquilidad—. No lo hagas por lástima, hazlo porque es lo que tú deseas.

Comprendía porque se lo decía, la castaña estaba preocupada por ella, era una decisión importante. La había visto en su peor momento, y realmente no quería pasar por lo mismo. Jennie no tenía la obligación de ser su soporte todo el tiempo, asumiría las consecuencias, pero por alguna razón esta vez no tenía dudas de por medio, quería intentarlo porque deseaba estár junto a Jungkook no era costumbre, ni siquiera sentía que estaba aferrándose a lo que tenían antes, estaba decidida a volver con él porque lo amaba.

Se había prometido no dar segundas oportunidades, incluso ya estaba haciéndose a la idea de que se convertiría en alguien independiente, pues sabía que no necesitaba estár con alguien para ser feliz, era lo bastante madura y entendía que la felicidad estaba con uno mismo. Pero amaba a Jungkook, era una increíble persona que había cometido errores, pero que se disculpaba y aprendía de ellos.

Él jamás la maltrató, no le fue infiel, ni la hizo sentir tonta, inútil o insuficiente, la apoyó cuando ni ella estaba segura de lo que hacía, no la dejó sola en sus peores momentos, le ofreció su hombro para llorar. El amor era mutuo. ¿Por qué habría de dejarlo ir por una equivocación?
Valía la pena luchar por personas como él.

—Gracias, Jennie —sonrió—. Puedes estár tranquila, soy consciente de lo que hago —le aseguró, la Castaña le creyó, pues su voz era determinada, al igual que su mirada, podía transmitirle seguridad.—Me voy, Jungkook me necesita.

-🖤Angie unnie💜