Miércoles (43)

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Emily's P.O.V.

Abrí los ojos de golpe y solté un gran grito ahogado, mientras me incorporaba en la cama y mis ojos bailaban por la habitación.

"¿Moja princezna?" Tanya preguntó preocupada, y sentí que su mano tocaba mi espalda suavemente y volví mi mirada para encontrarme con la suya preocupada. "¿Estás bien?"

"Yo... no lo sé". Me llevé la mano derecha a la frente y cerré los ojos, respirando hondo unas cuantas veces

repasando lo que acababa de pasar.

Un Sueño Despierto, Eso es lo que ella dijo que era pero... ¿Qué es eso? No fue una visión ella estaba allí conmigo, ¿Cómo?

Y todas las cosas que dijo, Tanto que... necesito llegar a Agata,

"Moja princezna?" Tanya preguntó, Sin duda sintiendo mi confusión miedo, y dejé escapar una respiración profunda y se levantó de la cama. "¿Qué pasa?"

"Mi abuela, ella vino a mí en un sueño, tengo que ir a Agata". Le dije y en cuanto lo hice soltó un gruñido bajo y profundo y sus ojos empezaron a oscurecerse ligeramente.

"¿Cómo llego a ti? ¿Qué quieres decir?" Me preguntó y negué levemente con la cabeza.

"No lo sé, ella dijo que no era una visión era un Sueño Despierto, no sé qué significa eso". Le dije y ella asintió lentamente.

"Vale, pero, ¿no crees que deberías ducharte antes?". Me preguntó y ante sus palabras miré mi ropa y recordé que anoche no me bañé ni me cambié.

"No creo que haya tiempo tengo que ir a Agata ahora, Y contarle todo".

"Moja princezna", dijo Tanya con firmeza, "si no vas a ducharte, al menos cámbiate y cepíllate tu cabello y tus dientes." Ante sus palabras, dejé escapar un profundo suspiro sabiendo que ella tiene razón,

"Está bien, sí, tienes razón". Ante mis palabras, una suave sonrisa apareció en sus labios, luego se inclinó y me dio un beso en la mejilla.

"¿Cuándo no ?" Preguntó contra mi cara y su aliento frío me hizo cosquillas en el pelo de la mejilla, haciéndome temblar.

Amo a Tanya, de verdad, pero ahora no es el momento de hacerme sentir así.

"Iré abajo y te prepararé algo para que comas cuando llegues", susurró contra mi mejilla, luego me dio otro beso antes de retirarse con una suave sonrisa.

"Gracias pero no-"

"Quiero hacerlo", me interrumpió y sonreí levemente.

Realmente soy la más afortunada de tenerla.

"Prepárate, estaré abajo esperándote cuando lo estés". Ella me lo dijo y yo asentí, y mientras la veía dirigirse hacia la puerta, me di cuenta de algunas cosas.

"¡Esperar!" -dije y ella se giró para mirarme. "¿Qué hora es?"

"Un poco más de las siete"

"Y Verónica-"

"Ya se fue a trabajar, lo hizo hace unos momentos antes de que despertaras".

"Está bien", asentí lentamente, recordando todo lo de anoche, y nuestra pelea, y lo que Tanya me dijo antes de quedarme dormido y luego que es miércoles. "¡Oh, Tanya! Se supone que debemos ir al-"

"El regalo de Carmen puede esperar. Hay cosas más importantes entre manos en este momento", me interrumpió y asentí lentamente sabiendo que tenía razón, pero también sintiéndome un poco mal porque realmente quería regalarle a Carmen esos delantales a juego. "No te sientas mal, Moja princezna. Cuando todo esto termine conseguiremos esos delantales para ti y para ella, pero por ahora debemos concentrarnos en lo que está pasando en este momento ¿vale?"

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