La chica mala (+18)

Capítulo 2: Dia de clases.

Max.

Sentí que una luz alumbraba mi rostro entonces me senté en la cama  y si ya había amanecido no quería que este dia llegara pero ahora me toca darme un baño, luego a desayunar para finalmente ir al colegio, entré al baño y fui directo a la bañera luego abrí la regadera el agua fría goteaba sobre mi cuerpo estaba pensando mucho la verdad no quiero ir al colegio pero que más toca salí de la ducha y me dirigí a ponerme el uniforme.

Luego de alistarme fui a ver mi mochila y salí a la sala para desayunar pero como siempre mi padre no está de seguro ya anda por allá con mujeres bueno y también vi a mi hermana Nahomy ahí dormida en la mesa como siempre se quedó dormida mientras desayunaba.

―Nahomy, Nahomy despierta es hora de ir al colegio―dije mientras movía su hombros.

―5 minutos más por favor―dijo adormilada.

―Levántate si no te levantas no habrá salchipapa de cena―la amenace. 

―¿Como te atreves? no te metas con mi salchipapa y ya vámonos―dijo mientras cogía su mochila y se levantaba de la silla.

Amenazarla con las salchipapa siempre funciona, bajamos las escaleras y subimos en el bus escolar al final después de 19 minutos llegamos al nuevo colegio. 

―Wow, este colegio es enorme―dijo Nahomy asombrada. 

―Bueno hermana espero que en este colegio consigas novio―bromee.

―Jajaja que gracioso―dijo Nahomy con sarcasmo. 

―Hermana es que nunca te he conocido a ningún novio―le dije sonriendo.

―A si mismo espero que tu consigas una novia mejor que esa tal Alejandra que me presentaste una vez―dijo algo enojada.

―Bueno entremos―dije mientras corría y la dejaba atrás. 

―Tramposo―gritó Nahomy mientras intentaba alcanzarme.

 Al final si me alcanzo y me despedí de ella con un abrazo ya que la campana sonó bien ahora tenía que encontrar a 1er bachillerato como no sabía donde quedaba decidí preguntar.

―Hola, me puedes decir ¿Donde queda 1er bachillerato?―pregunte a una chica pelirroja.

―Me ves cara de hablar con nuevos―dijo grosera aquella pelirroja para luego irse.

En otro lado. 

Nahomy. 

Estaba caminando por el pasillo del colegio estaba buscando mi casillero ya que me dieron una llave para un casillero aunque no encuentro ese casillero tendré que pedir ayuda así que me acerque a un chico.

―Hola, disculpa pero sabes ¿Donde queda el casillero 21?―le pregunté a aquel chico.

―No y tu no tienes derecho a hablarme ¿Acaso no sabes quién soy yo?―dijo grosero aquel chico.

―Eres alguien normal―dije rápidamente. 

―¿Quién te crees tu? no puedes faltarme el respeto mocosa―dijo para empujarme al suelo.

―Ya basta Steven Smith―dijo una chica mientras me ayudaba a levantarme.

―Apareció Larissa Escaleras defendiendo a cualquier nuevo para finalmente tener un amigo―dijo Steven sonriendo burlonamente.

―Al menos no tengo el corazón podrido―dijo Larissa enojada.

―Quisieras ser como yo y por cierto Larissa ¿Cómo vas con tu novio Stefano?―pregunto Steven burlonamente. 

―Stefano no es mi novio―respondió Larissa enojada.

―¿Entonces porque lo besastes la semana pasada?―dijo Steven claramente burlón.

 ―Ehhh.....Tu lo sabes muy bien Steven fue por tu reto que dijistes que si no lo hacía le dirias a mi madre sobre el 0 que saque en matemáticas―dijo enojada pero con cierto sonrojo en las mejillas.

―Cierto ya me acorde y tu nueva cuidate porque tu vida aquí no será fácil mientras yo esté aquí―dijo Steven mientras se iba.

―Chica no le hagas caso es un loco raro―dijo Larissa sonriendo.

―Bueno Larissa ¿Verdad? Gracias por ayudarme―le sonreí.

―¿Tu eres nueva verdad? ¿De qué curso eres?―preguntó Larissa.

 ―Si soy nueva y soy de décimo "A"―conteste 

―Serás mi compañera yo también soy de décimo "A" que emoción―dijo Larissa sonriendo.

En otro lado.

Max.

Pensé que aquí serían amables pero no esa chica pelirroja de cuyo nombre Shelly resultó ser una de esas populares caprichosas y las que molestan ¿Porque? lo digo bueno es que en toda la clase me lanzaba papeles e incluso me dijo que soy feo y que de ahora en adelante me hará la vida imposible. No sé cómo soportaré esto todo el año, Y todavía quedan días así