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Comienzo

Tv

El comienzo, de todo es doloroso, dejar todo atrás y volver a demostrar al mundo, por que estas donde estas.

Tras la ventana del Avión, veo la vida que tuve, pero al final hay cambios que ayudan y al parecer este será uno.

Nuevas oportunidades llegan a nuestra vida para ayudarnos a nosotros en nuestro camino de autodescubrimiento, desarrollo personal.

Le marco a Alex, el hombre que me sostuvo y me protegió como no lo hizo ninguno, Alex es como mi padre para mí. El estuvo para mí después de la muerte de mi padre.

¿Y tú madre? Gran pregunta, aún así no estoy muy segura de la respuesta, pero algo era claro, Me abandono, me maltrataba solo por que le recordaba a mi padre. Me dejo sin importarle nada y yéndose a crear su familia perfecta.

Solo se que tiene a sus tres hijas perfectas, y una gran marido, siendo todos "la familia perfecta"

Llego al aeropuerto, y lo primero que veo es al guardaespaldas de Alex a él lo conozco desde pequeña.

Alzó mi mano, para que alcance a verme entre este montón de gente.

Este lugar apesta a sudor.

Alza su mirada y choca con la mía, me sonríe y se acerca a mi.

—Señorita Tania, un placer tenerla de vuelta a Londres, déjame ayudarte.— sostiene mis maletas y nos dirijimos a la camioneta de lujo.

Me cuenta que Alex me espera en la casa ya que, tuvo una reunión.

Cuando vamos en la camioneta, dirijo mi mirada a la ventana, la lluvia empieza a caer.

Lo que la gente más odia, es lo que yo más amo;La lluvia.

Amo Londres por que normalmente siempre, deja caer sus aguas.

Apenas llevo aquí unos treinta minutos, y ya extraño a Rusia, mi Recce y claro mi madre, Regina.

Lo único que veo son las frías calles de Londres.

Llegamos ante los grandes muros.

Entrando y dejando a mi vista la mega mansión, bueno la de Regina era más grande que esta, pero estaba bien. No me quejaba.

Salí de la camioneta, y justo en ese momento dos guardia que no se de donde salieron, me cubrían de la lluvia con los Paraguas negros, a lo que yo negué con la cabeza.

—No, es necesario. Gracias.— sali de lo que  me  cubría y deje caer la agua ante mi.

Narrador (yo)

La chica, amaba la lluvia disfrutaba estar bajo esta. El pelo largo y negro se le pegaba en la espalda. Levantó el rostro, para disfrutar más de esta, cerró por unos segundos y dio varias vueltas, precisamente tres vueltas.

No le importaba mojarse.

Entro dentro de la mansión después de que las empleadas le abrieran la puerta.

Aquellas dos mujeres se sorprendieron del estado de la chica. Corrieron rápidamente por toallas y le ofrecieron una para que esta se cobijara con esta.

Justo en ese momento, los paso firme y seguros del Ministro Alex Morgan se hizo presente en aquella sala.

Ella estaba en frente de el, la miró de pies y cabeza y recordó las veces que escapaba la pequeña niña, al jardín ah disfrutar de la lluvia y como entraba empapada, su corazón se conmovió de mirar a aquella niña que tiene un lugar en su frío corazón.

No le importo nada, y fue por ella y la abrazo no le importo empaparse. Solo le importa su pequeña princesa.

Lucía igual de bella que siempre, pero algo noto ella imponía fuerza y sobre todo seguridad.

Regina había echo un gran trabajo con ella.

Los ojos de su niña, tenían leves lágrimas.

Si más la alzó levemente y le dio vueltas como cuando era niña.

La chica, se sentía completamente emocionada, y sentimental a tener a su casi padre enfrente de ella.

Ella pudo ver otro lado de la moneda, ella conoció otro lado de los Morgan que nadie conocía, y nadie lo haría... Solamente ella.

Tania, fue a cambiarse rápidamente ya que ya quería saludar a Sara.

La esperaba en la sala, la presencia de la rubia se hizo presente en aquella mansión fría.

La mujer dirigió levemente su mirada, y se encontró con aquella niña que amaba como una hija. Corrió hacia ella y se la pasó abrazándola en todo momento.

La cena llegó, y Sara para celebrar la llegada de su niña le preparo su comida favorita, Lasaña.

Cenaron, con una agradable platica, Tania dejo en claro que amaba Rusia con todo su ser. Y qué era claro que hiba a Extrañar a Reece y Regina, pero también  dejó en claro que ella también vino a Londres para enseñarle al mundo que ella es capaz de todo.

La primera noche de Tania, estuvo bien aunque claro tuvo que lidiar con sus problemas de insomnio.

Su habitación era bastante acogedora, inmensa en la habitación, Alex conocía a su princesa así que las paredes eran completamente blancas, y aquella habitación estaba repleta de todo lo que le gustaba a Tania.

Pudo dormir al menos tres horas pero eso fue lo suficientemente bien.

Por otro lado, en otra habitación Alex y Sara vivían un momento lleno de pasión y intensidad, recordando su pasado.

Sara, se encontraba confundida, pero tenía en claro que seguía amando  aquel hombre que en un momento la destruyó, pero se dejó disfrutar total la vida era una, y si podía siempre hiba a estar en los brazos de Alex.

Los deseos de Alex se prendieron más de lo que ya estaba.

Alex amaba tener en su brazos a la mujer que alguna vez lastimo, pero se prometió haci mismo nunca volver a hacer.

Lo más importante para el era su familia,  y claro ahí también está Tania, por que si bien no es de sangre una Morgan, ella pertenece aquella familia, su carácter lo demuestra , su fuerza lo demuestra todo de ella lo demuestra. Aparte aquella niña se robo el corazón de todos, ahora solo faltaba uno.

La vida, nos da empujones para hacer cosas que tal vez nunca pensamos en hacer. Y esto pasará aquí.

La mañana llego a Londres. Dando las cinco de la madrugada Alex y Tania se dirigían a la central.

Tania hiba dejar en alto su nombre. Sabía que él puesto hiba a ser temporal, pero no le importaba hiba a dar lo mejor en ella y demostrarle al mundo de lo que estaba echa, y que tenía un lugar en la FEMF y que merecía estar ahí.























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¿Qué les pareció?

Esto solo es para adentrarnos un poco más a la historia.

Espero lo hayan disfrutado.

 La Bruja Hipnotizante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora