Parte 2

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*Paola*
Estaba viéndolos entrenar desde detrás del cristal que nos separaba, nunca me imaginé estar aquí, después de lo que paso hace un mes con mi casa, Sr. starck me dio dinero para que me comprara ropa, amablemente me acompañaron wanda y Natacha y lo necesario para lo de la escuela, aparte me habían llevado al doctor para que me checara si el humo que respire no me había afectado los pulmones, pero afortunadamente no lo había echo, aun así el doctor dijo que reposara un mes, que no iría a la escuela por seguridad.

El entrenamiento había acabado y todos se estaban retirando, yo me aleje de hay para volver con ellos, baje las escaleras y vi como la puerta del cuarto de entrenamientos habría. Sentía que no encajaba aquí con ellos pero tenia que acostumbrarme y sinceramente me gustaba verlos entrenar: como golpeaban a los robots que se les cruzaba en su camino, capitán como lanzaba el escudo, ojo de halcón con sus flechas, thor con su martillo que era imposible de cargar, iron man lanzando rayos e igual que visión, la viuda esa agilidad que tenia para las armas, el doctor baner como se convertía en hulk y destruía todo ,wanda con sus poderes, que finalmente supe que si estaba bien cuando los vi y Pietro esa velocidad que tenia para esquivar todo.
Cuando estaban saliendo me vieron y me saludaron
-¿Siempre que entrenamos nos tienes que ver?- Sr. Starck dijo sonriendo

-Es genial como entrenan y como golpean a los robots - dije haciendo movimientos de pelea.

-¿Te gustaría ser como uno de nosotros?- dijo la pelirroja mientras tranquilizaba a baner.

¿Que? yo ser una como ellos, no me imagino yo peleando, no soy como ellos, ellos son héroes y son valientes, arriesgan sus vidas para salvar a otros, en cambio yo era una simple chica que de seguro no podría levantar el escudo de capitán.

-¿Qué? no, lo mío no son las peleas, las armas o ser un héroe, lo mío es el arte, los pinceles y ser una gran diseñadora grafica- señale.

- pero todos pueden cambiar de opinión- dijo el doctor baner ya en su cuerpo normal.

-Si, pero no- finalmente dije.

-Bueno pero si quieres aprender a defenderte, me avisas, serias una gran candidata para ser agente- dijo Natacha para finalmente irse con el doctor baner.

Todos se retiraron, menos los gemelos maximoff, ellos siempre salían al último.
-Siento algo que me dice que si eres valiente- acercándose la hermana de los maximoff, haciendo que me asustara ya que ella puede tener visiones y leer la mente.

-No lo creo- agache la cabeza

-¡Por supuesto que no!- grito el hermano acercándose con nosotros.

-No digas eso pietro- señalo su hermana.

-Yo solo digo la verdad, ni siquiera se pudo defender hace una semana cuando se escapo un robot de starck- seriamente le dijo a su hermana.

Era verdad lo que decía, como olvidar ese día.

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Ese día era cualquier otro día normal en mi nueva vida aquí, me levante, eran las 11 de la mañana, yo en verdad dormía mucho, me dirigí al closet y saque lo que me pondría, algo simple una blusa blanca un pantalón y unas sandalias, que mas daba siempre estaba encerrada, me metí a bañar, me vestí y listo otra mañana normal.
Salí de la habitación que me correspondía y vi el largo pasillo, el primer día me perdí de lo extenso que estaba, camine y llegue al comedor del edificio, el edificio estaba dividido en dos partes, el primero era la estancia de arriba donde estaban las habitaciones de ellos y la otra parte era la de abajo hay trabajaban e investigaban los agentes.
Me dirigí a la estancia del comedor para desayunar algo, me serví cereal y empecé a comer.

My Guardian Angel. *quicksilver*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora