Matrimonio por conveniencia

Prólogo

Ella estaba en un rincón de aquel cafe, apoyando sus piernas en la silla de frente, se encontraba realmente cansada no había descansado ni un solo momento en todo el día y para varíar todavía tenía que estudiar si es que tenía que sacar buenas calificaciones en la Universidad. Aparto por un momento la vista del libro para mirar el reloj de la pared. "12:00". Doce de la noche marcaban las agujas. "Genial" pensó ella suponiendo que ha esas horas ya no habría ningún cliente y por fin podría irse a descansar que era lo que más anhelaba ahora.

En ese momento la campanilla del café sonó dando el lugar a un hombre al cual ella tenía que atender, con fastidio y pesadez se levantó de la silla con mucho cuidado y apoyando sus manos en su abultado abdomen oculto bajo su mandil. Tenía más de cinco meses de embarazo, estaba sola en este mundo, su padre la echo cuando se enteró que estaba embarazada, su hermana debes en cuando iba ayudarla y para rematar no sabe quién es el padre de su Hijo/Hija desde hace cuatro meses, era muy joven teniendo solo veintitrés años y un bebé en camino la vida se le veía complicada pero ella siempre fue una chica fuerte e inteligente, por el día trabajaba en una biblioteca, por las tardes estudiaba botánica para poder abrir su propia florería pero lo que más le llamó la atención fue hacer chef eso es lo que estudiaba por las tardes, y por las noches trabajaba en un café como mesera.

La campana del mostrador sonó dando a entender que a qué Hombre que acababa de entrar estaba deseoso para que lo atendiera y siendo ella la única mesera tendría que ir a atenderlo.

- ¡Hinata ve a atender!-.

-¡Y-ya v-voy!. Contesto un poco nerviosa algo avitualmente y fue a tender al cliente.

El Había tenido un día bastante agitado, un día en el que el hizo que la compañía de su padre aumentará más sus ingresos y acciones se entera de algo que no le gusto la empresa que futuramente sería suya pero sus padres le pusieron una condición es que se casará y tuviera una familia en siete días.

Empezar sus padres le pusieron una condición que se casará y tuviera una familia , eso sería difícil pues el nunca le llegó la idea de tener familia. Pues el quería que la empresa armamentista fuera más allá fueron sus inventos y sus ideas que hizo que la compañía fuera lo que es hoy pero le pusieron como condición que el se casara y tuviera una familia para poder llevar a industrias Son, que era lo que más deseaba en el mundo, al enterarse de esto había puesto una sonrisa en su cara pues el tenía una "amiga" que le debía un favor el cual podría cobrarse en un instante entonces ¿Porque el mal día?... Al salir de una reunión importante de la empresa descubrió que su "amiga" salió del país.

Su día no pudo ser peor, queria, no, necesitaba ser el dueño de la empresa a como de lugar pero luego de que se enteró de que Videl, salió del país solo quería alejarse de ahi e reprimir toda su ira... Eran más de las once de la noche tras mucho conducir encontró un café abierto... No lujoso y ni mucho menos un bar (pero era lo que realmente necesitaba) pero un café no le caía mal. Aparco el carro y bajo de este, al abrir la puerta una singular campana sonó, encontró el lugar casi vacío solamente dos o tres personas cuando mucho, hallo sitio en la barra y tocó con rapidez la campanilla... Uno... Dos... Tres... Cuatro ¿Porque tardaban? Volvió a tocar con más insistencia hasta que sintió que alguien se acercaba sin más apoyo su mano izquierda en su mejilla viendo hacia el horizonte y pensando que rayos iba hacer ahora que se le estaba complicando.

-¿S-si?-. Pregunto ella con nerviosismo-¿ Que desea?-. El hombre estaba como ido- ¡D-disculpe!-. Dijo llamando la atención del pelinegro, el alzó su cabeza mirando intensamente a la joven.

-un café-. Pidió sin rodeos.

-¿Algo más?-. Ella rogaba que solamente pidiera su café y se fuera ella realmente necesitaba descansar y ese tipo no lo ayudaba en nada.