Matrimonio por conveniencia

CAP 2

Tres meses después.

En la residencia Son en la cocina Hinata, había suspirado en su entorno... Simplemente no estaba acostumbrada a su nuevo estilo de vida pues tener un chef y mayordomos es algo que no le gusto pues ella estaba acostumbrada hacer las cosas por si misma.

El café recién hecho sabía y Olia exquisito sobre todo en las mañanas y estás eran una de esas en las que se sentía el sol a flor de piel, el cielo parecía el manto que lo arropaba, la luz, entraba por las ventanas de la casa dándole un color natural y tan hermoso, si hermoso, así era todo.

Se podía quedar ahi parada, con los ojos cerrados y perdiéndose en su mundo si no fuera por unos llantos dulce y melodioso, unos llantos que aclamaba un poco de atención y quizás de comida.

-Ya voy mis tesoros, tranquilas-. Gritaba mientras apagaba la máquina de café, y los llantos se hacían más notorios.- calma, mis bebés, mamá ya va-.

Camino de forma rápida por toda la casa hasta llegar al cuarto de dónde provenian los llantos, ahí en una cuna dos bebés reclamaban por la atención de su madre, ella ya lo sabía por lo que se acercó y cargo a las bebés hasta que hace unos minutos dormían.

-¿Que pasa mis princesas?-. Preguntaba a las bebés, como si las niñas entendieran, mientras las cargaban y paseaban de un lado a otro, al parecer eso funcionó ya que los llantos cesaron, dejando escuchar a los pájaros que cantaban en la ventana.

-eso es, todo está bien, ahora esperenme unos minutos y...-. no pudo terminar ya que el timbre sonó por todo el lugar.- ¿Y ahora que?-. Las bebés se le quedaron viendo a su madre.- no espero nadie¿Y ustedes si?-. Pregunto haciendo posar una sonrisa en las bebés.- que lindas, ahora las dos esperen aquí, mientras atiendo-. Asentó a las bebés de nuevo en la cuna para ir a recibir a... Quién sea que tocaba el timbre.

Una y otra vez  sonaba el timbre muy insistente, era como un disco rayado... El mismo sonido una y otra y otra y otra vez...

-¡Ya, ya. Ya voy!-. Dijo, ahora caminando un poco rápido y abriendo la puerta.- lo siento pero es que... ¿Gohan?-. Pregunto viendo al pelinegro parado frente a la puerta.

-¿Hinata, lo siento olvide las llaves?-. Dijo mirando arriba y abajo a la peli azul oscuro, llevaba un vestido blanco de tirantes, Gohan se sorprendió, ¿Pero porque si los dos ya llevan un tiempo viviendo en el mismo techo?, pero aún así el se sorprendió, si bien cuando la vio por primera vez estaba con un aspecto de cansancio, y claro una gran abdomen, pero ahora era todo lo contrario, su cara pareciera rejuvenecida sin un rostro de cansancio ni ojeras, su pelo antes largo y maltratado ahora era corto pero liso como la seda, combinando con su piel de porcelana... Y su figura, esa era lo que más había cambiado, ahora avía adelgazado y recuperando su figura, una figura digna de envidiar que se almoldeaba a su vestido, definitivamente esa era otra Hinata.

-este... Yo te pregunté si tenías todo listo.- dijo haciéndose aún lado.- ¿ Que horas son estás de llegar?¿ Estaba preocupada por ti?.-

La peli azul oscuro no dejo de hacer preguntas al pelinegro mientras lo veía sentarse en el sillón, después de todo ¿Porque no?, el Son en cuestión no lo veía desde ayer pues cuando fue su "boda" el estuvo con ella y ni hablar cuando los dos fueron a Londres para que el arreglará algo de la empresa pero eso no lo detuvo y fueron a un Hospital para que chequen a Hinata, sin antes claro, contratar a un Doctor y un Enfermera y con todo el equipo necesario para el bien de Hinata y su Embarazo. Terminando los dos regresaron a la casa de vacaciones que tenía en el pueblo de Konoha. Pues la peli azul oscuro no quería irse del pueblo y los dos terminaron mudándose no es un mal matrimonio pues Gohan, siempre es atento con Hinata y las Niñas no importandole lo demás nomás eran ellas tres, no lo reprocharia pues el resultó ser un buen esposo en toda la palabra pero ella no soportaba que Gohan, llegué tarde a casa eso la preocupaba, pero a los tres meses el siempre estuvo a su lado incluso en el parto... ¡Sus sentimientos por el aumentaron con el tiempo! Pero no debía preocuparse pues el es su Esposo.