Desaparecidos

Capitulo cuatro

Capítulo cuatro.

Estar en una aburrida cena donde Adam Rivers el zombie viviente me miraba cada dos segundos no es mi plan favorito de el momento menos cuando a Cass se le ocurrió la maravillosa idea de cumplir con su castigo cuando recordó lo que hice así mismo quitándome mi celular una de mis posiciones más valiosas.

— Vamos Cass — presionó a lo que ella niega

— No — dice firme a lo que yo casi hago un berrinche ahí mismo

— Humpty no se volvió a quejar, estoy dispuesta incluso a hacer el intento de ser su amiga.

— Ni tú te lo crees Ava — volteo los ojos

— Amber — me mira ya cansada

— Es solo un mes.

— Un mes donde no voy a tener contacto ni con Owen, Amy incluso el idiota de Finny sirve.

— Lo debiste pensar antes de hacer esa tonta broma — la fulminó con la mirada viendo la expresión divertida de Adam, su boca se curvó en una sonrisa a lo que yo le hice un gesto con la cabeza

¿Quería pelear? Porque tenía un sartén en la cocina que le ayudaría muy bien.

— Si no es mucha molestia ¿que hizo la chica arcoíris? — casi vomito al escuchar usar ese término solo pocos lo usaban y la mayoría eran adultos, en ellos se escuchaba dulce en él tan asqueroso como su cara

— Si es mucho molestia estúpido así que mejor metete en tus asuntos como en el hecho de ¿donde demonios te vas a quedar a dormir cuando nos vayamos?

— Ava no seas mala con el chico — alzo una ceja viéndola a lo que se acercó a mi oído — Aún no dice nada así que no se puede ir.

— Las máquinas de tortura pueden ser útiles si me lo preguntas — parecía que lo pensaba pero finalmente negó

— Es ilegal dudo mucho que eso ayude a mi nueva campaña

— Bueno solo si nos atrapan cosa que no puede suceder ya que Owen tiene muchos contactos — le guiño un ojo a lo que finalmente niega

— Para la próxima lo considero. — suspiro pero aun así asiento

Adam nos miró a ambas extrañado para después dejar el tenedor en la mesa.

— ¿Si saben que estoy aquí? — Cass abrió los ojos de par en par viéndolo

— Tratamos de ignorar ese hecho ahora come tú carne antes de que se la de comer a los perros, lo merecen mucho más que tú así que adelante aprovecha esa oportunidad que dudo mucho que la vuelvas a tener — Rivers me miro

— ¿Que es esto? ¿Un típico capítulo de drama adolescente? — sonríe de lado pero sus ojos mismo indicaban una rabia que ni yo podía describir — El mundo fue malo conmigo por eso lo soy con el mundo — dice con un tono chillón — patético

¿Patético? Este chico me acababa de llamar patética, yo no era patética, eso quedó en el pasado, Ava Miller era patética, Amber Silver no jamás lo sería otra vez.

Fui humillada bastante y nunca voy a justificar la mierda que hago, seré una perra pero no una hipócrita, el día que me disculpe con alguien será porque me arrepintió realmente no para sanar una conciencia que no estuvo ahí el día que lastime a una persona, no seré nunca como Adam que él realmente si era un chico lamentable.

— Patético es un chico como tú, ¿sabes tan siquiera lo que harás con tu vida? O ¿vas a depender de los demás como tu padre? Una mierda si lo pienso, mínimo Rhett tiene a alguien que viajo en avión más de cinco horas para tener mínimo una información de él pero tu — rio sarcásticamente — ¿donde está tu padre Rivers? ¿Porque no viajo? Lo siguen llamando pero ya no contesta sabes como le llamo a eso, seguir adelante, cosa que todos debimos hacer hace mucho tiempo, dejar atrás la basura que él mismo viento se llevó ahora el mundo los vio por lo que son no por sus bolsos de marcan y sus caras bonitas así que lamento decirte que lo único patético aquí eres tú que ni siquiera eres útil para ayudar a aquello que te buscaron más que tu padre. — se levantó de la mesa molesto tanto que parecía que me iba a golpear