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El Mexicano más conocido como "ElMariana" se escontraba en una de las ahora recurrentes entrevistas que solía tener al este ser por así decirlo el "protagonista" de lo que muchos consideraban sería el "Main Event" de la Velada del Año.
― ¿Mariana? ― Chasqueó sus dedos el hombre mayor haciendo que el mexicano saliera de sus pensamientos y lo mirase.
― ¿Ah? Sí, disculpa Ibai, ¿Puedes repetir la prrgunta me... me disocié ― Respondió algo apenado mientras se removía incómodo en su lugar.
Ibai río. ― Hombre que estás perdido tú, bien, como te decía, ¿Quién consideras tu Mariana que es la persona que más te ha ayudado en este proceso? ―
Un silencio incómodo inundó el lugar, el más alto abrió la boca queriendo responder pero la cerro rápidamente al pensar bien en lo que estaba a punto de decir. Tenía dos personas en mente, Stephanie, claro sería lo más obvio, después de todo era su novia, y la amaba.
¿Verdad?
Y por otro lado Daniel, más conocido como "Plex" se hizo presente entre su debate mental acerca de lo que diría.
Nadie lo sabía pero desde que anunciaron su combate contra Plex, los antes mencionados habían comenzado una "relación profesional" (como le llamaba Mariana) desde que ambos se conocieron en el cara a cara hace algunos meses. Si Mariana con "relación profesional" se refería a contarse su día a día, llamarse por apodos cariñosos y ayudarse mutuamente en sus entrenamientos, entonces sí.
Esa era el tipo de relación que mantenían.
...
Mientras tanto en otro lugar Plex miraba incómodo la entrevista, él sabía que Mariana jamás diría su nombre.
Y eso dolía.
Sabía que no lo diría porque después de todo Mariana se la pasaba hablando de Stephanie, nombrandola cada dos palabras en cada oración. Por algo eran novios.
De tan solo pensar en esa palabra su estómago se removía. ¿Acaso todo lo que había pasado en esos meses de preparación no habían significado nada?
Suspiró pesado antes de regresar su vista al mexicano que había vuelto aún más incómoda la entrevista al no responder ya hace varios minutos.
― O sea.. si yo logré todo esto sin volverme loco fue gracias a mi novia Stephanie. ― Oyó responder a Mariana.
Aquella respuesta sacó a Plex de sus pensamientos y de igual manera le hicieron sentir náuseas. Estaba seguro que hubiera vomitado de los celos si no fuera porque un recordatorio en sus notificaciones resonó.
Su alivio no duro mucho al ver el que el chat spameaba "awww" y ese tipo de cosas ante la respuesta del mexicano.
Apretó sus manos con enojo alrededor del aparato electrónico entre sus manos, tan fuerte que juro haber visto como sus nudillos se volvían blancos ante la presión ejercida.
¿Por qué ella y no él?
Si al final de todo Osvaldo siempre terminaba llorando con él porque culpa de la chica que tanto hablaba. Empezaba a repudiar aquel nombre.
¿Por qué no podía ser su primera opción?
― Y ella fue lo mejor para mi, porque tipo yo estaba en una subida y bajada constante de emociones y ella sabes, siempre estuvo apoyandome, por ejemplo cuando yo no tenía ánimos y de pronto ella si me decía cosas del tipo que "levántate ya falta menos, lo estás haciendo bien" ― Se escuchó la voz de el de lentes otra vez.
Plex se quedó estático ante lo que acababa de oír salir de los labios de quién hace unas semanas había terminado aceptado gustar.
― No, no, no, no pudo haber dicho eso... Todo lo que dijo... ¡Lo hice yo, no ella! ― Se dijo para si mismo mientras oía como hablaba tan bien de su "noviecita" dándole méritos que él había hecho.
Sin más apagó el aparato y lo tiró en algún lugar de su habitación.
La odiaba, odiaba la forma en la que Mariana hablaba de ella, pero odiaba más haberse enamorado de Osvaldo.
...
Tres días pasaron desde lo sucedido en aquel directo.
Plex se había dedicado a ignorar los mensajes de su contrincante, pues como se sabía ellos solían hablar diariamente.
El español no tenía intenciones de responder, le había dolido.
Por otro lado Osvaldo había caído en cuenta el por qué del comportamiento del contrario, había dicho cosas que no eran ciertas, Stephanie nunca hizo todo aquello que dijo frente a miles de personas, fue Daniel el que las hizo.
Mordió su labio inferior con recelo antes de volver a mandar otro mensaje.
"¿Podemos hablar? de verdad quiero arreglarlo ;("
El más alto recibió aquella notificación y resignado a seguirlo ignorando la abrió.
Al final nunca podría odiar al Mexicano de bonita sonrisa que le hacía sentir las dichosas mariposas en el estómago.
Aprovechando que ya ambos se encontraban en Madrid quedaron en verse en dónde Mariana se estaba quedando en su estadía en la anterior mencionada ciudad.
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¿A ustedes les gustó? porque a mi no ;P Ya sé q escribo medio curiosito pero oc.
