No soy un héroe (Bl)

Es nuestro destino ser de esta manera?

Punto de vista de Daliec:

Era un día un tanto diferente, pero emocionante a la vez. Llegamos temprano a la academia para ordenas un poco para lo nuevo que verían lo nuevos estudiantes, espero que haiga buenas personas para ser amigos.

...

Estábamos limpiando nuestro salón, no suelo limpiar mucho en mi casa, pero hago lo que puedo.

Brando: Por dios, ¿por qué tenía que tocarme la parte de atrás? Es la parte más sucia –Limpia con desesperación una manchita que no se quita-

Nila: Vamos Brando eso no es la gran cosa –Barre-

Brando: Mira quien lo dice, la que tiene miles de sirvientes que limpian hasta sus joyas.

Nila: Eres un-

Antes de que la chica pudiera seguir con su insulto la cubeta que contenía el agua enjabonada fue tirada cerca de Brando lo que hizo que quedara medio empapado, algo que fue de parte del mismo chico de cabellos castaños marrones que tenía una sonrisa burlona.

Brando: ¡Oye que te pasa!

Darío: Lo siento, es que te faltaba una limpieza por tu terrible olor a idiota

Brando: Tu!

En un instante cuando el chico medio mojado quiso ir a enfrentarse al contrario una mano lo detuvo.

Daliec: Darío lo que has hecho es una grosería, discúlpate de Brando.

Darío: Ja en serio crees que me voy a disculpar con un perro faldero.

Brando: Quítate Daliec esta vez le daré una paliza.

Antes de que escalara el problema el profesor había entrado al aula y antes de que amos chicos hablaran, Darío había desaparecido.

Daliec: (Otra vez usando su habilidad sin permiso)

Brando: Algún día de estos voy a patearlo por las escaleras.

Daliec: Brando tu eres mejor que él, no pienses esas cosas mejor vamos a ir a cambiarte.

Luego de las palabras del chico ambos chicos se fueron al almacén de uniformes olvidados.

Brando: En serio Daliec, cómo puedes tenerle paciencia a ese tipo?

Daliec: Él no es una persona mala, tal vez es solo una etapa.

Brando: Daliec deja de justificar las tonterías que hace ese imbécil, sé que fue un gran amigo tuyo pero las personas cambian y muchas veces no podemos hacer nada al respecto.

Daliec: ...lo siento Brando, aun quiero confiar en él

Brando: Hay amigo tú no tienes remedio, bueno piensa lo que quieras solo que no te ilusiones tanto.

Mientras ambos amigos hablaban y uno se cambiaba, el mismo chico del que hablaban estaba recostado cerca de la puerta del almacén, para luego irse con una expresión de molestia.

Darío: (No necesito su maldit# consolación, como si en realidad le importara)

◊

Luego de ayudar a su amigo a cambiarse ambos volvieron al salón en donde el peli cabello decolorado vio a alguien con quien quería hablarle, solo que por alguna razón sentía nervios con solo verla.

Daliec: ¿Amigo estas bien?

Brando: Eh si claro solo que me siento algo mareado, pero sigo de buenas.

Daliec: ¿Oye esa no es la chica que te dio su pañuelo?

Brando: Oh que coincidencia, pero que lastima se me olvido su pañuelo en mi casa será en otra ocasión.