𝐀 𝐯𝐞𝐜𝐞𝐬 𝐥𝐚𝐬 𝐝𝐞𝐜𝐞𝐩𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐬𝐨𝐧 𝐞𝐥 𝐦𝐨𝐝𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐢𝐞𝐧𝐞 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫 𝐥𝐢𝐦𝐩𝐢𝐞𝐳𝐚.
-𝐏𝐨𝐞𝐬í𝐚 𝐏𝐮𝐫𝐚Drin drin drin...
Nunca odie mas ese sonido que ese día.
No sé si a esto se le llamará cruda, pero si tenía un pequeño lado de mi cabeza con una pequeña punzante presión y aún tenía que trabajar.
Prendí mi teléfono para verificar la hora. Pero de pronto me percaté que tenía demasiadas notificaciones de Instagram. Eran de varios chats. Todas respondían mis historias. Me pareció raro porque según yo no había subido nada.
Me metí a mis historias
–... me van a anexar... ay Skech.... Pero me voy a casar con David....
–No, no, no, no. ¿Que carajos hice? –exclame, lamentándome por parecerme buena idea bajo los efectos del alcohol.
Borre todas las historias rápidamente. Pero aunque las subí en la madrugada y me había despertado témpano, algunos de mis amigos si las habían visto.
Me moría de la vergüenza. No sabía que me causaba más pena, si mi estúpida manía por decir que me iban a anexar, el decir que me casaría con David o la forma tan expresiva en la que explicaba detenidamente cómo me besó Skech. Afortunadamente no tenia a ninguno de los dos en Instagram.
Entonces vi que tenía una solicitud de seguimiento. Juro que casi me desmayo cuando leí david_c. Era el, no podía creerlo.
¿Porque?, bueno en realidad eso no importaba. Tarde unos segundos antes de aceptarlo, pero obvio tenía que hacerlo, lo más sorprendente era que él me la había mandado, no yo a él. Sentí que estaba soñando. Cuando le di seguir de nuevo skech fue el primero que me apareció en sugerencias.
Pensé en que si ya tenía a uno no sería tan raro agregarlo a él y además, después de lo de ayer ya había un tipo de confianza ¿no?. Con la mano temblándome lo empecé a seguir. Tenía bastantes fotos, no entendía como podía lucir tan bien.
De pronto regrese a la noche anterior, de solo recordar ese beso se me ponía la piel chinita y se le aceleraba el corazón. Cerré los ojos esperando volver a sentir esa sensación. Pase mis dedos por mis labios, esos labios que aún ardían. Esos labios bendecidos por sus besos. Dios, qué exagerada sonaba, pero así me sentía. Estaba tan feliz por lo sucedido, que no me importaba el recuerdo de verlo besándose con Dani.
De pronto una llamada me saco de mis recuerdos tan escandalosos.
–¿Bueno? –conteste sin siquiera ver quien era.
–Ven a mi casa, ya –era Alexa, y su voz sonaba como que no estaba del mejor humor.
Me levante y fui a su casa.
Antes de abrir la puerta de su habitación empecé a intentar adivinar porque me regañaría esta vez. Abrí lentamente aumentando la agonía.
–Ya pasa –escuche que decía mientras yo seguí indecisa.
Cuando entre me vio con una cara de reproche.
–¿Es por lo de las historias? –dije antes de tiempo y ella me miro de lo más extrañada.
–¿Que historias?–me pregunto.
–Amm... – ¿ahora que decía?
–Bueno, eso ya me lo explicarás después –dijo – Ahora dime, ¿que carajos hiciste anoche?
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LAS EXPECTATIVAS DEL AMOR
Teen FictionEl corazón nunca olvida el lugar donde dejó sus mejores latidos...