Felix estaba concentrado en las líneas que hacía en su lienzo. Hace unos minutos, Hyunjin fue a buscarlo para que lo acompañara a pintar un rato y le había dado un lienzo en blanco a él y otro a Seojun.
— Parece que Seojunie será igual que su tío —Hyunjin tenía al pequeño en sus brazos mientras este marcaba sus manos en aquel papel.
El rubio se sintió conmovido por aquella imagen.
— Parece que le gusta mucho la pintura.
Dejó el pincel en su lugar y fue hasta donde se encontraban los otros dos para observar mejor lo que su hijo estaba haciendo.
— Deberías dibujar a papá —el pelinegro tomó las mejillas regordetas del pequeño y las apretó levemente—. Tu papi tiene unas muy bonitas pecas que merecen ser apreciadas.
Felix sintió como sus orejas comenzaban a calentarse.
— ¿Coqueteas así con todos?
— Solo contigo.
Hyunjin soltó una leve risa al ver cómo el menor cubría su cara roja de vergüenza. Tomó un poco de pintura y le pintó la nariz.
— Ahora eres un lindo payaso.
Y fue así como comenzó una guerra de pintura entre los tres, o bueno, entre los dos adultos y el pequeño Seojun, quien simplemente reía y aplaudía feliz por la situación.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
