Amélie Lambert, ha logrado ascender en el mundo del diseño de interiores y la arquitectura con dedicación y creatividad. Tras la muerte de su padre, Louis Lambert, el peso de continuar el legado recae sobre sus hombros. A pesar de la presión, Amélie...
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Juliette Simon
8 p.m de un sábado
¿Había dicho que Nathalie es una persona muy insistente? Creo que la palabra insistente se queda corta, no ha parado de instar a Théodore y a mí; a asistir a su show o más bien al L'Éden.
No tuvimos más remedio que acceder, enserio es muy pesada, y es por eso que estamos las dos aquí, yo parada desde el marco de mi habitación, viendo como la castaña revolotea toda mi ropa del armario. Esta haciendo un desastre, hay tops, faldas y vestidos por doquier. Ella insiste en que me debo de ver bien, y con eso, se refiere a sugestiva y atractiva.
—Tu vas a limpiar esto. — Le hago saber, mientras me recargo en la pared. Van para los quince minutos y aún no encuentra nada, o más bien, nada le llama la atención.
—Le diré a uno de los oficiales. — Vuelve de nuevo al armario, viendo los vestidos colgados en los percheros.
—Ellos no son mucamas, Nath.
—La gente hace cualquier cosa por dinero. ¡Dios! ¿No tienes otra cosa que no sea faldas tubo y camisa manga largas?
—Es para el trabajo.
—Para tu cumpleaños te voy a regalar un armario completo con vestidos sexys. — Volteo los ojos. Veinte minutos.
—¿A qué hora comienza tu show?
—A las 10 p.m. ¿Sabes algo de Théo? — Niego. El italiano ha salido hace poco menos de una hora, dijo que tenía que hablar con su equipo sobre algo del caso, luego iría a su casa para cambiarse para el club y por último el vendría por nosotras, supongo que aún está en el trabajo. — Espero que llegue a tiempo. Como sea, te sentarás en el VIP, solo di que me conoces.
—Ese lugar esta lleno de babosos intentando no sacar su pene para masturbarse.
—Yo también los odio, pero al ser sábado, el club esta restringido a personas importantes y son más... ¿respetuosos?
—Bien. ¿Encontraste algo?
—Hoy la temática es de ángeles y demonios.
—¿Temáticas?
—Es para divertir a los clientes, por mes hacen eventos y cada sábado la temática es diferente. ¡Al fin! — Grita dejándome ver el vestido rojo. — Tenemos al ganador.
El vestido rojo es absolutamente deslumbrante. Es un modelo ajustado que se ciñe a mi figura, realzando cada curva con una elegancia provocativa. El escote en forma de corazón destaca mi busto, mientras que los tirantes finos dejan mis hombros al descubierto. La tela de satén brilla con cada movimiento, añadiendo un toque de glamour. El vestido termina justo por encima de las rodillas, con una abertura lateral que deja entrever mi muslo izquierdo, añadiendo un toque atrevido y seductor. La espalda del vestido es abierta, mostrando una línea elegante de piel y dejando al descubierto un tatuaje delicado en mi omóplato.
