♡Mente Sobre Máscaras♡

Capítulo 55

Marinette POV

-¿Recuérdame por qué estamos haciendo esto de nuevo?- Le pregunté a Damian mientras reajustaba con fuerza la venda sobre mis ojos.

-Tenemos que estar preparados para cualquier situación-, explicó. Podía escucharlo mientras cortaba el aire con su katana, calentando para nuestro ejercicio.

Desde que descubrimos las identidades secretas de cada uno, estábamos pegados a la cadera. Siempre estábamos juntos, dentro o fuera del traje.

Hubo algunas dudas sobre el hecho de que Robin finalmente se llevara bien con Ladybug, e incluso solicitara patrullar con ella, pero los Wayne no tenían ni una sola idea de qué convenció a Damian.

Entrenábamos todos los días antes de la patrulla, y solo nos habíamos acercado más y más.

-O tal vez saldré sin Tikki-, le dije, mencionando la idea de otro traje nuevo.

-Si me demuestras que estás listo, te apoyaré en eso-, dice. El aire cambia y sé que nuestra lección ya ha comenzado. Él viene hacia mí desde mi lado izquierdo, con una katana a cuestas, y yo lo esquivo, rodando por el suelo.

Me levanto de un salto mientras trato de escuchar sus pasos ligeros como una pluma.

-Tienes sentidos agudizados, pero no confías en ellos fuera de tu traje- dice Dami, y de repente está al otro lado de mí.

Apenas salto fuera del camino, escucho su katana zumbando junto a mi cara. Sé que nunca me golpearía, pero es terriblemente preciso.

-Es difícil confiar en ellos cuando no soy Ladybug-. Digo entre respiraciones, frustrada por tener que confiar en mi sentido del oído para esto.

Odio ser ciego.

Damian hace una pausa, su postura ahora relajada, -Pero tú eres Ladybug, dentro o fuera del traje, eso es lo que eres-.

-Eso es fácil para ti decirlo-, me quejo. Él era Robin. Era el hijo biológico del Caballero Oscuro, había sido criado para esto.

Por otro lado, tuve que aprender por las malas cómo ser un superhéroe. El Maestro Fu hizo lo mejor que pudo, pero yo lo había perdido como mentor hace mucho tiempo.

-Te sorprenderías-, dice Damian, y seguimos entrenando. En su mayor parte, soy yo esquivando sus movimientos, tratando de cansarlo antes de hacer mi movimiento.

Nunca tengo la oportunidad, mi vista es como una muleta en esta situación. Sin él, nunca gano la confianza para volverme ofensivo.

-Es casi la hora de patrullar-, dice Damian, y lo escucho colocar su katana en su lugar en la pared. Me quito la venda y se me escapa de la mano. En lugar de atraparlo, como sé que puedo hacerlo, observo cómo cae revoloteando al suelo.

-¿Vas a volver a tu apartamento o vienes conmigo?- Pregunta Damian, pero está pidiendo más que eso. Me pregunta si quiero ir a la Batcueva con él, como Marinette antes de convertirme en Ladybug.

Es una muestra de confianza.

Me agacho para agarrar la venda de los ojos antes de que él tenga la oportunidad de hacerlo. Le digo: -Confío en ti. Y hasta cierto punto, en tu familia. Pero cuanta más gente lo sepa, menos secreto será. Es más riesgoso, porque no quiero que tu familia salga lastimada por problemas que no son de ellos. Quiero decir, ser el Gran Guardián-

Me detengo cuando noto que Damian ya no escucha. Él está pensando. Duro. Puedo verlo en su cara.

Es como si estuviera intentando recordar algo de hace mucho tiempo.