Aunque no lo creyera convenientemente, era Kyle quién no hacía nada más que llorar. Su mejor amigo de toda la maldita infancia se ha ido, por culpa de Kenny, ya no está. Las manos heladas de Kenny le arrebataron la vida a Stanley.
Aunque el sol ya había salido, quería quedarse en su cama, no ir al colegio, puesto que él es él único que sabe que pasó. Generalmente nadie lo sabe, pero sin embargo él carga la dicha de saber lo cuál arriesga sería decirlo. Mantiene una respiración serena puesto que no sabe qué hacer.
Sería una completá mierda ir al colegio y que ya no esté esa persona.
-¿Kyle ya te despertaste? Si es asi baja a desayunar por favor.
Nuevamente se quedó en silencio.
-¿Kyle? ¿Kyle? ¡Kyle! Te estoy llamando por favor.
Miró a la puerta de donde provenía el ruido, suspiró y abrió la puerta.
-Aquí estoy mamá, no tiene por qué gritar, si la oí.
Sheila buscaba la forma de leer el rostro de su hijo, un rostro tan cansado y menos esperanzador. Quisiera saber qué le ocurría como unos ojos tan llamativos como lo es el verde esmeralda, ahora solo en ese verde tan apagado. Dejó de pensar en aquello que probablemente le podría preocupar.
-Si.. Solo baja..
Sheila se hizo a un lado para que Kyle bajará, más sin dudarlo puso de nuevo una cara preocupada mientras seguía a su hijo detrás.
Más Kyle no sabía lo que le esperaba, al llegar al colegio, inundaba un montón de tristeza por alguien en particular; Stanley, era una venita que sobresalía de su frente de tanto pensar en ese nombre, los recuerdos de ese día era lo único que tenía en su cabeza. Más no esperaba poder tener esa misma hacha matándolo como lo hizo con la cara de ebrio de Stanley.Qué monótono era para que sonara la sirena y anunciara el inicio de clases, quizás todos esperaban eso. La ausencia del capitán del equipo de fútbol americano de South Park, un pueblo diminuto. Ver cómo el silencio, rogaban por ese alegre muchacho que saltaba en pasillo por pasillo, con Eric y Kenny. de un momentito a otro se había olvidado de ese pequeño arrogante de manos llenas de culpa. Ese mismo que había asesinado a su amigo.
Mismamente, Kenny pasaba por los azulejos del pasillo de la mano con Craig Tucker, también de igual forma del mismo cómplice pendejo del rubio, ante la muerte de Stanley Marsh.
Craig miraba a los lejos que ese rostro lleno de ira, su mirada era intensa, los dos verdes perforaban la vista de aquél que se entromete, entre la rivalidad. Apretó sus su puño conteniendo las ganas de alzar su voz y decir algo vulgar.
El más bajito sintió esa tensión repentina que se formaba en la atmósfera del pasillo.
-¿Está todo bien?-a lo cuál Craig ni respondió, ante eso alzó su mirada a lo que estaba ocurriendo. Desde ese mismo punto sus violetas conectaron con los verdes apagados, bastó una mirada para saber que había dañado tantos años de amistad y haber cometido el peor error de su vida. Ahora intenta plantearse internamente que hizo.
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Blood love/ Crenny/South Park
ФанфикCiertamente no me convence lo que tu boca destructora diga, ya que mi oídos necios te esquivan. Sin saber cual lenta será la monotonía donde nos encontramos, al no ser que, nuestros labios se unan en son de paz y la sangre selle nuestro sucio trato...