Las despedidas eran duras y ese día Mily lo aprendió.
Al despertar por la mañana Mily se levantó de la cama como de costumbre se preparo para ir a desayunar pues era domingo. No había clases así que ese día ella tenía pensarlo pasarla con su pequeño amigo felino.
O eso creía ella cuando de repente alguien tocó la puerta de su dormitorio era Hermione la cual tenía una cara de angustia y miedo, y a su vez tenía los ojos rojos.
-Mily...
La nombrada miro ala chica de cabello castaño con el ceño fruncido
-¿Sucede algo Her?
Hermione suspiro y tomo aire para poder decirle la noticia.
-Encontraron a un gato.. ala orilla de la colina hacia la casa de Hagrid..
Mily seguía con el ceño fruncido viéndola aún
-¿Aja y?.. ¿es pequeño? Podría quedármelo.
-No Mily no estas entiendo encontraron a un gato.. muerto..
Los ojos de Mily se abrieron en grande y sintió una punzada en su corazón no ¿eso era un broma verdad?
-Hermione.. no.. me acabo de levantar no es hora de bromas.. además Sam esta conmigo..
Mily se adentro a su habitación otra vez en busca de su felino con la mirada de Hermione sobre ella.
-Es Sam..
Aquello hizo que el corazón de Mily dejara de later por unos segundos y su mundo se detuviera. <<"ES SAM.. ES SAM, ES SAM">> Eran palabras que se repetían en su cabeza una y otra vez.
-¿Que?.
Mily sintió el nudo en su garganta viendo hacia Hermione esperando a que ella le dijera que era broma o algo así pero ella no lo hacía, Hermione no decía que era una broma.
-Hermione...
La nombrada se acerco a Mily la abrazo dejando la cabeza de Mily en su hombro derecho mientras acariciaba su espalda y le daba palabras de consuelo.
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Mily se encontraba viendo por una ventana tenía los ojos hinchados y rojos, el día había dejado de ser perfecto.
Se ser un día hermosamente soleado había pasado a ser un día nublado con lluvia, es como si el cielo pudiera entender su dolor y llorara con ella.
Posiblemente muchos pensaran que es un simple gato pero Mily Sam era más que un simple gato era parte de su familia, ella Harry, Sam y Hedwing eran familia, una familia de cuatro dos humanos y dos animales.
Pero ahora habían pasado a ser una familia de tres, Mily seguía llorando ni siquiera la habían dejado ver a su gato una última vez ella quería despedirse pero le dijeron que estaba lloviendo y que era mejor que ella se quedara.
