parte 4_aquel que no muere

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Gritos de dolor, angeál y smideis gritaban por el dolor que sentían en su cuerpo, el demonio cuatro brazos destrozó sus partes, el no le importa en lo más mínimo que su enemigo y humano griten.

Termino dentro, tomo a angeál de la cara y empezó a horcarla, angeál trato de liberarse, pero fue inútil, perdió el conocimiento y smideis tomó el control del cuerpo.

En sus ojos había una furia que crecía al pasar de los segundos, orach bastardo inútil, te juro que te mataré solo espera a que recuperé mis fuerzas, el demonio hablo cambiando su voz a un tono grave y frío.

Orach solo dio una sonrisa, ¿y como se supone que lo harás? Jajajajaja, sabes han pasado 8 meses desde que te trajeron aquí, ya no hay ningún rastro de lo que eras antes, y sumale querida mía que tú cuerpo es más humano que demonio.

Sonrió y estampó a smideis contra el suelo, empieza a golpear, sus puños se llenaron de sangre, pero no se detuvo ahora estaba cumpliendo algo que queria hacer desde que perdio contra smideis.

En el pasado, dos demonios combatieron juntos, no por que quisieron si no porque no tenían de otra, masacraron a cientos de enemigos, ángeles caídos, yo quedaré sobre ustedes el joven smideis grito y blandió su espada cubierta de una energía de color rojo, su espada echa de oro corto a cientos de ángeles caídos, ninguno quedo de pie.

Smideis cayó con mucho sueño y fatiga, sus músculos se desgarraron, pero se mantiene consciente de lo que le rodea, vio al otro demonio siendo sometido por enemigos, solo sonrió y se fue volando.

Orach que vio eso se enfureció, lo habían dejado como carnada, odiaba ser despreciado, pensó que iba a morir cuando los ángeles apuntan a su último engrer soul, pero antes de cualquier movimiento, un demonio corto las alas del enemigo.

Se voltearon y miraron a la misma muerte, dejaron de respirar y sus vidas se extinguieron, solo quedaron sus cuerpos inertes.

El demonio cubierto por un manto oscuro, miró a orach, cerró sus heridas y regeneró sus corazones faltantes, lo llevo lejos de ese lugar y...

Juro que tendré mi venganza, ahí smideis y angeál maldijeron con todo su odio, se miraron y no dudaron en atacarse, porque sigues vivo, smideis hablo y sujeto la cara de angeál, este dijo lo mismo, ni siquiera debería estar aquí, no se cuantas veces eh muerto.

Se calmaron pues su cuerpo se había restaurado, ahora estaban ante un demonio cuyo poder los dejo un poco tensos, sabian que debian matarlo, pero dudaban de ser capaz de hacerle algo.

El demonio hablo sin interés alguno, humano déjame preguntarte algo, tú nos odias, la pregunta fue respondida en ese instante, angeál escupió hacia el demonio sentado en su trono, ojala te mueras de la peor forma.

Odio a todos aquí, incluso daría mi alma para que todos se jodan, hablo con todo el veneno que había acumulado.

El demonio antes tales palabras se empezó a morir de la risa, jajajaja jajajajaja jajajajajajajajaaaaa, smideis hablo creando una boca en el estómago del cuerpo, oye imbécil te parece gracioso esto, escupió un chorro de ácido que cayó en todo el demonio.

Pero el ácido desapareció antes de poder tocarlo, smideis y angeál apretaron los dientes con molestias, no hay manera de que puedan liberar una pelea, nada de nada, solo se quedaron esperando una muerte, aunque sea larga y dolorosa.

El demonio sin expresión alguna chasqueó los dedos, pronto una demonio entró a la sala.

Llévalos a que sean marcados, déjalos a merced de los demás, está perra será usada como el ganado que es, y por último enséñale donde están sus seres queridos.

悪魔と私の友情 Akuma to watashi no yūjō/Amistad con mi demonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora