La historia de Mateo

EP. 2: Tarde mojada

Pasó una semana desde eso y estaba aquí otra vez, ayer creo escuché que hoy mi mamá y mi hermano saldrían a hacer unas compras al super de la ciudad, así que era una oportunidad perfecta para seguir con el plan que armé esa misma mañana.
Todo seguía como siempre, miramos un par de películas con mi hermano, jugamos un poco y fuimos a comer. Luego de un par de horas ellos estaban alistándose para salir antes de que haya más tráfico ya que irían en taxi.

Cuando salieron, subí como una bala a mi habitación y fui directo a la bolsa mágica, saqué uno de ellos y seguí lo mismo que la anterior vez, teniendo algo de cuidado con las cintas. Todo el tiempo acostumbraba a estar en playera, short y crocs, así que bajé a la sala a mirar algo de televisión por el momento.
En un instante tocaron la puerta, eso me puso nervioso, pero si era algo importante y no abría me metería en problema con mi mamá. Con cautela abrí la puerta y era Wil con el resto del grupo.
- Mateeeee, ¿quieres venir a jugar un rato? Anda di que sí, estamos todos y vamos a ir al campo de aquí al lado -
No sabía si ir por lo que traía bajo el short.
- Anda vamos, apagaré esa tele y vendrás con nosotros
Como el mueble de la TV estaba mirando hacia la puerta solo entró en la casa, la apagó y me llevó casi a rastras. Así como estaba con sandalias y todo.

Al llegar encontramos al equipo de la otra sección de mi escuela, ya que iba en 6° de primaria en ese tiempo, y creo que habían quedado en un amistoso para hoy con nosotros, no estaba ni enterado pero ahora ya sabía.
Como sabían que era buen arquero me tocó estar ahí. El juego empezó y todo era diversión y competencia.

Al pasar los primeros 30 minutos de partido se dio el descanso. Solo sentía como el pañal estaba algo húmedo por el sudor que daba el calor de la tarde, encima el sol estaba hacia mi portería; porque no me había ni agitado. Decidí mojarlo un poco con la pipi que guardé desde la mañana. Lo que si tenía era sed, no había tomado nada de líquido desde la noche anterior.
Al parecer escucharon mis súplicas y la mamá de uno de mis compañeros que vivía cerca también, trajo un balde lleno de refresco para todos. Yo me tomé como 3 vasos por el calor y la sed que tenía, lo mejor era que estaba helada 😋.

Todo continuó normal. El partido terminó y como hubo empate fueron a penales.
En ese momento ya sentía algo de ganas de ir al baño por los nervios y la presión que sentía.
El primero en patear fue el equipo contrario así que me tocaba tapar a mi. Cuando estuve en la portería esperando el tiro sentí como unos chorritos de pipi se escapaban y se quedaban en el pañal ya mojado. Estaba súper nervioso. Pateó y por poco se marca el gol, tuve la gran suerte de que la calculara mal y lo hiciera fuera del arco.
La emoción me jugó mal e hizo que mis ganas de hacer pipi se hicieran más fuertes, yo trataba de aguantarme lo más que podía caminando intranquilamente.
Su arquero no logró taparla y nuevamente me tocaba.
Ya no podía aguantar. Hizo el tiro, salté y logré taparlo cayendo de pansa al piso. Ahí en un descuido la pipi empezó a salir con fuerza hacia todo el pañal. Para no levantar sospechas me levanté mientras el chorro aún seguía, caminé lentamente sintiendo lo tibio que se sentía allí dentro mientras poco a poco terminaba de ir al baño sin tener que moverme. Pero como ya había mojado el pañal toda la cantidad de pipi de ahora no logró absorberlo y se desbordó un poco, solo senti como un pequeño hilo de líquido tibio bajaba por mi pierna izquierda hasta mi sandalia.
Acabé en el momento justo, así que fui otra vez al arco y sin problemas logré atajarla como siempre. Mi equipo resultó ganador, todos nos felicitamos y nos fuimos a nuestras casas porque ya estaba anocheciendo, me despedí de Wil con nuestro saludo especial y fui a casa. Tuve suerte de haber tenido un short oscuro y que no mojé mucho el pañal la primera vez. Pero valió totalmente la pena.

Cuando llegué a casa, quise bañarme por lo sudado que estaba. Pero antes me deshice del pañal mojado. Entré a la casa, cerré la puerta y ahí nada más me bajé el short, rompí las cintas, me lo saqué y volví a subirme el short. Abrí la puerta y fui al contenedor general de basura que estaba afuera y lo boté ahí.
Fue la mejor tarde que tuve 🥲.

¡MUCHAS GRACIAS POR EL APOYO! Sigan votando y apoyando para que está historia continúe 😉