Capítulo 8: Descubrimientos en Liyue

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Con un nuevo plan y renovada determinación, Lyria y Lumine se prepararon para explorar más a fondo Liyue. Sus investigaciones los habían llevado a varios lugares interesantes, pero la cueva en la Montaña Tianheng parecía ser el punto de partida más prometedor. Decidieron regresar allí con la esperanza de desenterrar más pistas sobre el paradero de Aether.

Regreso a la Montaña Tianheng

La subida a la Montaña Tianheng fue ardua. El terreno era escarpado y traicionero, pero Lyria y Lumine estaban decididas a seguir adelante. Con la ayuda de Paimon, que volaba y daba ánimo constantemente, lograron mantener el ritmo.

—Este lugar tiene algo especial —dijo Lumine, mirando las imponentes formaciones rocosas—. Siento que estamos cerca de algo importante.

Lyria asintió. El aire estaba cargado de energía elemental, y su intuición le decía que no estaban lejos de descubrir algo crucial.

Al llegar a la cueva que Lyria había encontrado anteriormente, encendieron algunas antorchas para iluminar su camino. La cueva estaba tal y como la recordaba, con inscripciones antiguas y cristales brillantes.

Lumine se acercó a las inscripciones en la pared, examinándolas de cerca.

—Estas inscripciones parecen ser de un lenguaje antiguo —murmuró—. Puedo reconocer algunas palabras gracias a mis viajes, pero no todas.

Lyria, utilizando su conexión con el viento, intentó sentir la energía que emanaba de las inscripciones. Se dio cuenta de que había un patrón en la disposición de las palabras y símbolos.

—Creo que estas inscripciones están destinadas a guiar a alguien —dijo Lyria—. Tal vez si seguimos el patrón, encontraremos algo más.

Trabajando juntas, Lyria y Lumine descifraron las inscripciones. Descubrieron que formaban un mapa rudimentario de la cueva, señalando un camino oculto más profundo en la montaña.

Siguieron el mapa hasta una sección de la cueva que parecía una pared sólida. Lyria, confiando en su intuición, utilizó su poder Anemo para despejar la ilusión que ocultaba una entrada secreta. Un pasaje estrecho se abrió ante ellas.

—Aquí vamos —dijo Lumine, entrando con cautela.

El pasaje las llevó a una cámara oculta, mucho más grande y llena de energía elemental. En el centro de la cámara, encontraron un altar antiguo con una gran piedra grabada con runas.

—Esta piedra... —Lumine se acercó, sintiendo la energía que emanaba de ella—. Parece contener un mensaje.

Lyria, utilizando su conexión con el viento, comenzó a descifrar las runas. Mientras lo hacía, sintió una conexión con Aether. Era como si él hubiera estado allí, intentando entender el mismo mensaje.

El Mensaje de la Piedra

Después de varios minutos de concentración, Lyria y Lumine lograron descifrar el mensaje en la piedra. Hablaba de una "llave" y un "portal" que conectaba diferentes dimensiones. Aether parecía estar buscando este portal, creyendo que podría ser una forma de reunirse con Lumine.

—Esto tiene sentido —dijo Lumine—. Aether debe haber creído que este portal podría llevarlo a mí.

Lyria asintió.

—Parece que estamos en el camino correcto. Pero aún necesitamos encontrar más pistas sobre la ubicación exacta de este portal.

Mientras reflexionaban sobre el siguiente paso, escucharon un ruido detrás de ellas. Se giraron rápidamente, preparándose para lo peor, pero se relajaron al ver a un conocido de Lyria.

—Ganyu —dijo Lyria, aliviada—. ¿Qué haces aquí?

Ganyu, la secretaria de Liyue Qixing, les sonrió con amabilidad.

—Estaba investigando algunos reportes de actividad inusual en esta área y me encontré con ustedes. Parece que están en medio de algo importante.

Lumine le explicó brevemente su situación y lo que habían descubierto.

—Es un honor conocerte, Ganyu. Cualquier ayuda que puedas ofrecernos sería muy apreciada —dijo Lumine.

Ganyu asintió.

—He oído hablar de este portal en antiguos registros. Se dice que está protegido por un antiguo guardián. Si necesitan encontrarlo, quizás deberían buscar en los Archivos de Liyue. Puedo ayudarles a acceder a ellos.

Con la ayuda de Ganyu, Lyria y Lumine decidieron dirigirse a los Archivos de Liyue para buscar más información sobre el portal y su guardián. Ganyu les aseguró que, con los permisos adecuados, podrían acceder a los documentos antiguos que podrían contener las respuestas que buscaban.

Antes de partir, Lyria tomó un momento para reflexionar sobre lo lejos que habían llegado. Con cada pista que encontraban, se sentía más cerca de descubrir el paradero de Aether y cumplir la promesa que había hecho a Lumine.

Hacia los Archivos de Liyue

El viaje de regreso a Liyue fue más rápido con la guía de Ganyu. Al llegar, se dirigieron directamente a los Archivos de Liyue, un edificio imponente lleno de antiguos textos y pergaminos.

Con la ayuda de Ganyu, obtuvieron acceso a los documentos más antiguos. Pasaron horas revisando los textos, buscando cualquier mención del portal y el guardián.

Finalmente, Lumine encontró un pergamino que parecía relevante. Describía un lugar llamado el "Templo del Viento y la Tierra", donde se decía que el portal estaba escondido.

—Esto es lo que necesitamos —dijo Lumine, mostrando el pergamino a Lyria y Ganyu.

Lyria asintió, sintiendo una renovada esperanza.

—Entonces, nuestro próximo destino es el Templo del Viento y la Tierra. Debemos prepararnos para lo que sea que encontremos allí.

Con una nueva pista en sus manos y el apoyo de Ganyu, Lyria y Lumine se prepararon para su próxima aventura. Sabían que el camino sería peligroso y lleno de desafíos, pero estaban más determinadas que nunca.

La búsqueda de Aether los había llevado más lejos de lo que habían imaginado, pero cada paso los acercaba más a su objetivo. Con el Templo del Viento y la Tierra en su horizonte, sabían que estaban a punto de desentrañar uno de los mayores misterios de Teyvat.

Mientras el sol se ponía sobre Liyue, Lyria, Lumine y Ganyu se prepararon para su viaje, listas para enfrentar cualquier desafío que les deparara el futuro. La búsqueda de Aether continuaba, y con cada día que pasaba, estaban más cerca de reunirse con él y descubrir los secretos que Teyvat ocultaba.

La nueva arconte anemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora