Bathwater

Instinto y Deseo

Hoseok estaba en la playa de Atami Sun Beach, Taehyung tenía una sesión de fotos para una revista japonesa, este estaba solo en bañador y, de vez en cuando, veía a Hoseok sonriendo descarado. De pronto los antojos por el embarazo empezaron, vio aquellas sandillas jugosas y fue a buscar su bolso para comprarlas. Taehyung vio a lo lejos que Hoseok se iba al hotel, vio que le acompañaba uno de los trabajadores de la revista, se molestó al ver la sonrisa de su amante, pero se controló.

Hoseok agradeció a Yuta por su amabilidad, sucede que había sentido un mareo y el joven le había auxiliado. Cuando regresó a la playa el chico le acompañaba y conversaban acerca de algunos mitos y leyendas de la zona. Hoseok no encontraba coincidencia entre aquella información y la que había encontrado en la internet. — ¿Okuri Okami es un demonio malo?

— Según la leyenda lo es, sigue a las personas hasta que llega a sus casas y devora a la familia.

— Pero ¿Qué hay de su forma humana? Ellos se transforman en humanos para poder disfrutar de la vida y el placer con los humanos... 

— Entonces tú no hablas de un Okuri Okami, hablas de un Kyubi no Kitsune, más bien como se le conoce en Corea un Kumiho. A veces suele equivocarse con los Okuri Okamis porque los demonios zorros son muy astutos y bromistas, suelen engañar a los humanos y en ocasiones pueden destruirlos. Escuché una leyenda acerca del castigo de un Kumiho que se enamoró de una deidad.

Hoseok tomó la sandilla cortada en trozos y sonrió, luego fue con Yuta a una silla y le habló con curiosidad. ─ Eso es dime... ¿Por qué piensa que es un Okuri Okami?

─ Según la leyenda que escuché, Inari le borró la memoria, si él se daba cuenta de que era un zorro y no un lobo... Podría ascender a ser un zorro Celestial... ─ Yuta observó que Hoseok estaba confundido, supongo que al igual que muchas de las lectoras. ─ Creo empezaremos desde el inicio, hace mucho tiempo el Zorro de las nueve colas, Kumiho decidió jugarle una broma a los dioses creadores con ayuda de Hebi, la serpiente, este participó en el engaño. Fue condenado a estar mucho tiempo en el mundo humano sin poder pasar al mundo espiritual, pero se enamoró de una deidad, pero esta deidad tenía un hermano celoso quien engañó a los dos para que durmieran por largo tiempo, pero a petición de Tsukuyomi, el dios Inari les borró la memoria más de lo que debía e hizo creer a Kumiho que era solo un lobo. 

─ ¿Por qué?

─ Simple, cuando el Kumiho cumple mil años se convierte en un Zorro celestial, es decir una deidad y si es una deidad...

─ Podía estar con el dios sin problemas. 

─ ¿No creen que ya han hablado demasiado?─ Preguntó Taehyung en un tono enojado, entonces Hoseok le ignoró para seguir hablando, pero Kim se acercó y le abrazó por la espalda. ─ ¿Acaso no ves que necesito mimos? Además nuestros bebés están necesitados de mi atención y mimos. 

Hoseok frunció el ceño pues no entendía qué estaba pasando, según habían acordado estarían en Japón como amigos y no como amantes o novios. Hoseok se levantó de la silla y le sonrió a Yuta. ─ Gracias por la información... Nos vemos en la cena. 

─ Fue un placer conversar contigo.

─ Gracias... ¡Ey!─ Exclamó Hoseok, al sentir la forma en que Taehyung lo jalaba, fueron hasta un restaurante en la playa, el pelinegro jamás soltó su mano. ─ ¿Qué... estás haciendo?

─ Invitándote a comer. ─ dijo de lo más normal, luego se sentó y tomó el menú. Hoseok tenía tanta hambre que obvio la actitud de Taehyung y se sentó para poder ordenar algo delicioso. 

─ Dijimos y fui categórico al decir que solo vendríamos como amigos y no como amantes o lo que sea que piense en este momento Yuta. 

─ ¿Yuta? ─ dijo arqueando una ceja, luego el preguntó. ─ ¿Ya no es señor Nakamoto?